SANTO DOMINGO, RD.- El Recodo es una comunidad incrustada en las montañas del municipio de Guayabal de Azua, allí su población lucha por su desarrollo tomando como principal timón la Educación.
Sin embargo, esos deseos encuentran obstáculos que impiden que más de 200 estudiantes logren recibir el anhelado pan de la enseñanza.
Y es que en el 2012 cuando pensaban que sus reclamos al fin serían parte del pasado, cuando en el gobierno de Danilo Medina inició la construcción de un liceo digno para esa comunidad, en plena etapa final de la obra y con un 85% de avance, de manera inesperada fue paralizada.
12 años han pasado y con ellos los deseos de decenas de alumnos de estudiar en un lugar adecuado, mientras la infraestructura se deteriora, las telarañas, grietas, las hierbas y la suciedad se apropiaron del lugar.
Desde entonces reciben docencia en una iglesia que le prestó su espacio para que la educación no se detuviera en la comunidad, aglutinados, exponiéndose a las inclemencias del tiempo y exposición de enfermedades.
El pasado martes en el Municipio de Guayabal de Azua en unos 10 centros educativos decidieron paralizar la docencia en respaldo a la situación que atraviesa la Comunidad de El Recodo que aún no han podido iniciar el año escolar.
Mientras tanto los maestros cumplen sus horarios sentados en piedras y debajo de un árbol
Los padres y estudiantes de esa localidad aseguran que no habrá clases hasta recibir una respuesta contundente del gobierno y reinicien los trabajos del liceo Emiliano Custodio.