REDACCIÓN INTERNACIONAL.- Un vuelo de EgyptAir que se estrelló en ruta a El Cairo, Egipto, no dejó supervivientes. Las 66 personas que viajaban a bordo (56 pasajeros y diez miembros de la tripulación) murieron a causa del accidente provocado por una negligencia del piloto. Según los informes, el hombre llevaba un cigarrillo en la cabina.
El vuelo MS804 viajaba desde el aeropuerto harles de Gaulle de París al aeropuerto internacional de El Cairo cuando cayó del cielo entre la isla griega de Creta y el norte de Egipto, el 19 de mayo de 2016.
La Oficina de Investigación y Análisis para la Seguridad de la Aviación Civil (BEA) de Francia ha concluido desde entonces que la salida de humo en el aire del piloto, Mohamed Said Shoukair, provocó un incendio a bordo del avión Airbus A320, ya que su cigarrillo encendió el oxígeno que se escapaba de una máscara de oxígeno en la cabina.
Las autoridades egipcias inicialmente dijeron que el accidente aéreo fue el resultado de un ataque terrorista, pero esas acusaciones fueron desacreditadas. En marzo de 2022, la BEA publicó un informe que alegaba que se había filtrado oxígeno de la máscara de oxígeno, según los datos de la caja negra que capturaron el sonido del silbido del oxígeno.
En el momento del incidente, a los pilotos de EgyptAir se les permitía fumar en la cabina. Esa regla, a día de hoy, es diferente. Aun así, el accidente es objeto de un caso de homicidio involuntario ante el Tribunal de Apelaciones de París.