REDACCIÓN- Testigos de la balacera en la iglesia presbiteriana de Laguna Woods dijeron que el pastor golpeó al agresor con una silla cuando hizo una pausa para recargar su arma y otros miembros de la congregación lo abordaron para inmovilizarlo. Tanto el atacante como las víctimas son de ascendencia taiwanesa.
El tiroteo en el condado californiano de Orange, a 80 kilómetros de Los Ángeles, provocó la muerte de una persona y cuatro heridos de gravedad, según han informado las autoridades locales.
Apenas un día después de un brutal ataque en un supermercado de Buffalo que dejó al menos 10 fallecidos, casi todos afroestadounidenses, tuvo lugar este domingo una nueva balacera en una iglesia presbiteriana del condado Orange, cerca de Los Ángeles. Allí murió una persona y cuatro resultaron gravemente heridas.
La iglesia Ginebra, donde ocurrió el tiroteo, está en Laguna Woods, una localidad generalmente tranquila, situada a 50 millas al suroeste de Los Ángeles, y de unos 18,000 habitantes, de los cuales el 80% es mayor a los 65 años.
La policía del condado de Orange resaltó el papel crucial que tuvo la comunidad para neutralizar al agresor.
Los primeros tiros se escucharon después del servicio religioso en la iglesia de California
El tiroteo comenzó hacia la 01:26 pm hora local, según el reporte de la oficina del alguacil, cuando los feligreses asistían a un banquete tras el servicio religioso matutino en esa iglesia del condado de Orange, a unos 43.5 millas (70 km) de Los Ángeles.
Los miembros de la congregación estaban tomándose fotos con un pastor que había regresado de Taiwán después de dos años cuando se escucharon las primeras detonaciones.