COLOMBO.- Las autoridades de Sri Lanka rodearon el Parlamento con fuertes medidas de seguridad este miércoles, mientras los legisladores se preparaban para elegir entre tres candidatos a la presidencia, con la esperanza de que el nuevo líder pueda sacar a la isla de una agobiante crisis económica y política.
Una victoria del presidente en funciones Ranil Wickremesinghe, uno de los dos principales aspirantes pero al que se oponen muchos ciudadanos de a pie de Sri Lanka, podría dar lugar a más manifestaciones contra la élite gobernante después de meses de escasez de combustible, alimentos y medicinas, dijeron varios manifestantes.
“Si Ranil llega (al poder), no podremos tener estabilidad”, dijo Duminda Nagamuwa, que organizó protestas en Colombo tras la finalización de los nombramientos. Otros manifestantes han dicho que el presidente en funciones es un aliado de la poderosa familia Rajapaksa, a la que culpan de la crisis económica.
El otro candidato principal, el legislador del partido gobernante Dullas Alahapperuma, es más aceptable para los manifestantes y la oposición, pero no tiene ninguna experiencia de Gobierno de alto nivel en un país que apenas tiene dólares para las importaciones y necesita desesperadamente un rescate del FMI.
El tercer candidato, Anura Kumara Dissanayaka, líder del partido izquierdista Janatha Vimukti Peramuna, sólo cuenta con tres escaños en el parlamento de 225 miembros y no tiene posibilidades reales de ganar.
Cientos de policías, paramilitares y militares se desplegaron alrededor del edificio del parlamento y una carretera de acceso tenía al menos tres barricadas. Personal de seguridad en lanchas rápidas patrullaba un lago alrededor del edificio, y jeeps militares y vehículos blindados estaban aparcados dentro del perímetro.
Wickremesinghe, seis veces primer ministro, se convirtió en presidente en funciones la semana pasada después de que el entonces presidente Gotabaya Rajapaksa huyera a Singapur cuando cientos de miles de personas salieron a la calle contra su administración y ocuparon su residencia oficial y su despacho.
Los manifestantes también quemaron la casa privada de Wickremesinghe y asaltaron su oficina.
Wickremesinghe cuenta con el apoyo de un sector del partido gobernante que tenía un total de 145 escaños en las últimas elecciones parlamentarias de 2020. Alahapperuma cuenta con el apoyo de la otra sección, así como del principal partido de la oposición, que obtuvo 54 escaños en la última votación. Varios partidos pequeños han prometido apoyarle también.
Las cifras actuales no están claras porque algunos parlamentarios se han convertido en independientes.
El candidato que obtenga más de un tercio de los votos válidos emitidos será declarado elegido. Si ningún candidato alcanza esta barrera, el que tenga el menor número de votos será eliminado de la competición y se tendrán en cuenta las preferencias de los legisladores para llegar finalmente a un ganador.