SANTO DOMINGO.- La delincuencia se convierte en el factor común que más preocupa a los residentes de diferentes sectores del Gran Santo Domingo.
La escalada de la delincuencia mantiene en zozobra a los ciudadanos, pues los robos y atracos están en su máxima expresión y afecta a todos los sectores.
La intranquilidad social, es tal que se ha convertido en el tema obligado en los vecindarios. Estar dentro de sus casas no exime a los ciudadanos de ser víctima de malhechores, pues sus métodos de robos los ejecutan también hasta en viviendas con altas medidas de seguridad.
En arterias comerciales como la ubicada en la Duarte con París los vendedores viven en constante sobresalto.
La población espera medidas contundentes que protejan su integridad, pues en el peor de los casos las personas mueren en medio de atracos.
Para los ciudadanos el garantizar la seguridad, se ha quedado solo en intenciones.