Madrid.- Convertido en Otto, un anciano gruñón, Tom Hanks protagoniza «El peor vecino del mundo», una llamada sobre la soledad en personas mayores. «Lo poderoso que tiene el cine es que llama a la acción. Alguien puede ver esta película e ir a tocar la puerta de su vecino por si necesita algo», explica a EFE.
«La historia conmueve porque es universal, todos conocemos un Otto», dice Hanks en una entrevista por la presentación de esta película de Sony, que llega a las salas el 28 de diciembre y que él mismo produce.
Dirigida por Marc Foster, la adaptación de la novela sueca «Un hombre llamado Ove» de Fredrik Backman presenta la historia de un hombre solitario y maniático que ve su vida alterada por la llegada al vecindario de una nueva familia encabezada por Marisol (Mariana Treviño), que cambiará sus paradigmas y su forma de enfrentar la vida.
«Hay muchas cosas en la cinta que están presentes en cualquier cultura, son universales», desgrana el siete veces nominado a los Oscar sobre el filme, una afirmación con la que coincide Foster. «Me quedé fascinado al leer el libro porque es como Hamlet: una historia que se reconoce en cualquier parte del mundo».
«Tendencia a vivir centrados en el individualismo»
Aunque retrata una realidad universal, Hanks apostilla que la historia está teñida de aspectos muy comunes en la sociedad americana. «En Estados Unidos hay una gran tendencia a vivir centrados en el individualismo», dice. «Vivimos rodeados de gente, como nuestros vecinos de enfrente, a la que no prestamos nunca atención».
Han pasado más de treinta años desde que encarnó a un particular vecino en la película «The Burbs», y ahora vuelve a hacerlo añadiendo una dosis de ternura que ha convertido en sello propio de algunos de sus personajes. «Solo se actuar de una manera; conmovido por la historia que represento y tratando de ir más allá», indica.
«Me tomo la molestia de crear ciertos momentos y llevar al espectador al lugar que quiero, me pregunto cómo de lejos tengo que llegar para conseguir transmitir eso, y trato de hacerlo. Ojalá hubiera un secreto, pero voy a por ello y ya», dice sobre su forma de abordar los personajes, esa con la que consiguió dos Oscar y cinco Globos de Oro el protagonista de cintas emblemáticas como «Forrest Gump» o «Philadelphia».
Compañera de reparto, Mariana Treviño
Para la actriz Mariana Treviño, que protagoniza el filme junto a Hanks, el actor es «impresionante y generoso». «Es muy fácil conectar con él, abre sus puertas emocionales y repite las tomas las veces que sean necesarias», esgrime la mexicana.
«La primera vez que leí el guion me puse a llorar; las escenas del personaje de Otto debatiendo con la vida son muy fuertes, y al mismo tiempo hay puntos de comedia», explica sobre un género que le parece «el más parecido» a la vida real. «La vida transita entre esos dos estados».
Para Treviño el mensaje que la cinta lanza es inequívoco: «Estamos vivos hasta el último día de nuestras vidas, y siempre hay gente que sin premeditarlo está dispuesta a hacerte sentir mejor con un gesto», dice la actriz, al igual que Foster, quedó atrapada por la novela.
«La sociedad en la que vivimos y en especial desde la pandemia vive sin mirar quién hay al lado», dice el director, que con la película trata de dar pie a «contar historias que hablen de hacer comunidad, de ayudarnos y de encontrarnos unos con otros».