Santo Domingo.- Unos 14 jefes de Estado y de Gobierno han confirmado su asistencia a la XXVIII Cumbre Iberoamérica que iniciará el próximo 23 y se extenderá hasta el 25, en la ciudad de Santo Domingo, en la cual todos los estados miembros de la conferencia estarán representados.
Así lo anunció este lunes el ministro de Relaciones Exteriores dominicano, Roberto Álvarez, en una rueda de prensa en la que explicó ciertos detalles del encuentro, aunque sin facilitar de forma pormenorizada la lista de asistentes, por motivos de seguridad.
El encuentro, que tendrá lugar los días 24 y 25 de marzo, estará precedido por una reunión de cancilleres y un foro empresarial que forma parte integral de la cumbre y al que asistirán más de mil empresarios de la región iberoamericana, que trasladarán sus conclusiones a los mandatarios.
Álvarez destacó como «aspecto esencial» que esta «es la primera cumbre presencial desde 2019 de la Conferencia Iberoamericana» a consecuencia de la pandemia de covid-19, de modo que «hace cuatro años que no se reúnen los mandatarios de los 22 países» miembros de la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB).
En este sentido, destacó que la presencia en sí de los mandatarios en el evento permitirá llevar a cabo «contactos personales y reuniones bilaterales» que darán la oportunidad de tratar directamente «temas urgentes que atañen a dos países», que no precisó, aspecto que para el canciller también resulta esencial.
Puntos fundamentales
Una parte fundamental del trabajo han sido las trece reuniones preparatorias en materia de Relaciones Exteriores, Economía, Finanzas, Medio Ambiente y Agricultura, entre otras, que se han mantenido y cuyos resultados se presentarán en la cumbre.
Del encuentro saldrá una declaración que contiene principalmente trabajos de inclusión de una carta digital, una carta medioambiental y una ruta crítica de seguridad alimentaria, explicó el canciller.
El ministro señaló como «aspecto importantísimo» a tratar en la cumbre «el acceso al financiamiento para los países de renta media, como República Dominicana, que no tienen acceso a fondos en términos concesionarios. Ese es uno de los aspectos críticos hoy en día, las tasas de interés que están ahogando a nuestros países».
La carta medioambiental iberoamericana «consolida la visión compartida frente los desafíos del cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación y establece lineamientos para orientar políticas públicas en esta materia.
La carta de principios y derechos en los entornos digitales coloca al ciudadano en el centro de la transformación digital de forma inclusiva, atiende las brechas existentes y busca evitar brechas nuevas, además de señalar los aspectos que los Estados deben tener presentes para poner en marcha políticas públicas.
La ruta crítica de seguridad alimentaria iberoamericana «propone aumentar el comercio intrarregional y el desarrollo de cadenas de suministro más resilientes», así como «consolidar la agricultura familiar, expandir el acceso a financiamiento para transformar los sistemas agroalimentarios y fortalecer la infraestructura digital rural.
El viceministro de Política Exterior Multilateral, Rubén Arturo Silié Valdez, apuntó que uno de los temas a debatir en la cumbre será la migración, señalando la fuerte presión migratoria que está sufriendo República Dominicana, principalmente procedente de Haití.
República Dominicana ha llevado la cuestión de la situación del país vecino a todos los organismos en los que está buscando la participación de la comunidad internacional en la resolución de esa crisis y puede ser que Haití «salga en la declaración, pero siendo nosotros los anfitriones del evento no podemos imponerlo en la agenda», apuntó.
La cumbre también permitirá un diálogo privado entre todos los mandatarios durante un almuerzo en el Palacio Nacional, sin que haya una agenda preestablecida, debates que dirigirá el presidente dominicano, Luis Abinader, y que permitirán buscar nuevos senderos en materia de colaboración, fortalecimiento del comercio y cooperación sur-sur, entre otros aspectos.