REDACCIÓN INTERNACIONAL.-Un hombre armado abrió fuego en un centro comercial de productos con descuento, matando a nueve personas e hiriendo a otras siete antes de ser abatido por la Policía, en la ciudad de Allen, Texas.
El sospechoso, bajó de un sedán plateado antes de comenzar a disparar, causando pánico entre los compradores que estaban presentes en el lugar.
Testigos informaron que vieron a niños entre las víctimas. Algunos también observaron a un policía y un guardia de seguridad del centro comercial en el suelo.
Este incidente se suma a la larga lista de tiroteos masivos en los Estados Unidos en los últimos años, lo que ha llevado a un debate en el país sobre la necesidad de políticas más estrictas sobre el control de armas.