REDACCIÓN INTERNACIONAL.– Neuralink, la compañía de Elon Musk de chips para el cerebro, ha anunciado que ha recibido luz verde del regulador farmacéutico para hacer su primera prueba en humanos. El polémico empresario vaticinó en diciembre que el permiso de la Food and Drug Administration (FDA), la oficina que supervisa productos, medicinas y procedimientos quirúrgicos de Estados Unidos, llegaría durante el primer semestre de este año. No se equivocaba, aunque la aprobación no fue fácil, pues escucharon una negativa el año pasado.
La empresa, fundada en 2016, ha informado esta tarde que este es el primer paso que permitirá que su tecnología “ayude a mucha gente”. Hasta el momento, el regulador no ha hecho público lo que afirmó Neuralink en las redes sociales.
“El reclutamiento aún no está abierto para nuestra prueba clínica”, ha informado en Twitter la empresa, quien promete más información en los próximos días. Neuralink lleva varios años aumentando las expectativas sobre sus avances. En 2020, Musk afirmó en una presentación que los chips fabricados por la empresa podrían curar algunos tipos de parálisis y unos casos de insomnio.
El controvertido magnate, quien siempre ha tenido poco cuidado midiendo sus palabras, incluso señaló que el dispositivo podría dar a los usuarios una visión “superhumana”. En ese momento mostraban uno de sus primeros implantes, en un cerdo.
Un año, después, en 2021, Neuralink hizo una de sus presentaciones más virales. Un mono, Pager, aparecía frente a una televisión y seguía con atención lo que sucedía en la pantalla, un videojuego de Pong. El primate controlaba los mandos solo con la mirada gracias a un par de semiconductores del tamaño de una moneda de 25 centavos que tenía implantados en ambos hemisferios del cerebro.
Musk dijo hace algunos meses que habían iniciado un “extremadamente cuidadoso” papeleo ante la FDA y que estaban trabajando con la agencia. “Pienso que probablemente en seis meses podremos poner nuestro primer Neuralink en un humano”, dijo el controversial millonario, quien esta semana ayudó en Twitter al gobernador de Florida, Ron DeSantis, a lanzar su campaña a la presidencia de 2024.
Antes de esa ocasión, Musk había presumido al menos en tres veces desde 2019 que buscaba la aprobación de la FDA para hacer pruebas clínicas en humanos. Pero fue hasta 2022 que los encargados de la compañía comenzaron el proceso legal ante el regulador.
De acuerdo con la agencia Reuters, esta primera petición fue rechazada por las autoridades de la FDA poco después de ser presentada. El regulador dudaba de la seguridad de la batería que utiliza el semiconductor, compuesta de litio. Preocupaba que los pequeños cables que salen del cerebro pudieran ser invasivos en otras áreas del cráneo. Finalmente, los encargados del proceso también hicieron preguntas sobre las implicaciones que tiene quitar el chip y si este proceso podría dañar tejidos cerebrales.