REDACCIÓN INTERNACIONAL.- La serie «The Idol», el aterrizaje de Abel «The Weeknd» Tesfaye en la televisión, viene anunciado como el relato más sórdido visto hasta la fecha sobre la industria musical. Pero más allá de su contenido para mayores de edad, es más bien una fábula sobre el lado más oscuro de la fama, según su reparto.
«Los ponemos en la cima del mundo y luego los tiramos, así, tan fácilmente. Casi parece que nos causa placer», explicó la actriz Lily-Rose Depp, encargada de dar vida a Jocelyn, la «popstar» que protagoniza «The Idol», durante su reciente paso por el Festival de Cannes.
Hija del también actor Johnny Depp y de la cantante francesa Vanessa Paradis, la actriz de 24 años sabe bien lo que es lidiar con la fama desde el comienzo de su vida, aunque «The Idol» -cocreada por por Tesfaye (The Weeknd), Sam Levinson (Euphoria) y Amy Seimetz- lleva al extremo la presión de la celebridad.
«Es una serie de ficción, obviamente, y estamos contando una historia de ficción. Pero nos estamos basando en un mundo que por supuesto tiene oscuridad en él», indicó la actriz.
Para Troye Sivan, estrella de la música y parte también del reparto de «The Idol» con el que es su primer papel en televisión, la fama es algo que fácilmente se te sube a la cabeza.
«Creo que puede sacar a la luz mucha oscuridad en la gente y creo que es algo que la serie explora. Para mí, estando en la industria de la música como mi trabajo real, siento que tuve momentos donde veía cosas y estaba como ‘oh, definitivamente reconozco esa emoción o ese rasgo de carácter'», detalló.
No obstante, el cantante de 27 años aseguró nunca ha sido testigo de cosas tan «de locos» como las que aborda «The Idol» y consideró que su andadura hacia la fama ha sido un viaje cómodo porque fue «lento» y «gradual».
«Nunca tuve ningún tipo de momento de la noche a la mañana donde mi vida cambió en un día. Creo que eso, para la gente, da mucho miedo. Para mí fue algo consistente», agregó Sivan, además de contar que siempre puede volver a Australia, a su familia y amigos, para disfrutar de un poco de «normalidad».
La serie, que llega a la plataforma HBO Max este 5 de junio (la noche del 4 en América), ha venido precedida de numerosas polémicas por su contenido explícito, los cambios de dirección creativa y los rumores de ambiente tóxico en el rodaje, algo que el equipo rechazó de plano en el gran estreno de gala de los dos primeros capítulos, que tuvo lugar en la 76 edición del Festival de Cannes.
Y para la actriz Da’Vine Joy Randolph, que al igual que Sivan interpreta a uno de los personajes que componen el séquito de la popstar protagonista, ni siquiera esa presunta indecencia de la serie es para tanto.
«No es escandalosa por el simple hecho de que no estamos reinventando la rueda (…) A puerta cerrada, todo el mundo sabe lo que hace en la intimidad de su casa, así que para mí, creo que en todo caso sólo muestra una versión muy realista y a veces exagerada de cómo pueden ir las cosas», indicó Randolph.
«Al mismo tiempo, creo que es importante señalar que esto muestra un cuento con moraleja. Pones un espejo para mostrar que esto es lo que puede pasar dependiendo de cómo elijas navegar y moverte. Pero tiene varias capas y creo que cuando lleguen los episodios tres y cuatro, definitivamente el cinco, habrá un giro que no te esperas», prometió.
Lily-Rose Depp también se mostró convencida en Cannes de que las escenas de sexo y los desnudos de su personaje en la serie son un reflejo de la desnudez emocional de Jocelyn, una cantante que busca un nuevo rumbo para su carrera en medio de un mar de presiones y que se deja embaucar por un manipulador gurú de la autoayuda interpretado por Tesfaye.
«Refleja el mundo en el que vivimos -manifestó la actriz- Siempre supimos que íbamos a hacer un programa provocativo. Y eso es algo que era parte de la atracción para mí. No tengo miedo».