EE.UU cambia de opinión y ofrece arma que desestabiliza la guerra
Redacción.- El Kremlin manifestó hace unos meses que no toleraría el envío de tanques Leopard y Abrams a Ucrania. No obstante, comenzaron a llegar los primeros carros de combate occidentales. Hace un mes, el presidente Joe Biden dio luz verde al suministro de aviones de combate estadounidenses F-16 tras aceptar las insistentes solicitudes por parte de Ucrania.
Ahora, el Gobierno estadounidense contempla la entrega a medio plazo de misiles de largo alcance ATACMS prevista, en un proyecto de ley de defensa con una asignación inicial de 80 millones de dólares para la compra de armas.
La Administración del presidente estadounidense, Joe Biden, se había negado hasta ahora al envío de estos misiles ya que, según había argumentado, si se suministraran podrían utilizarse directamente contra Rusia. EEUU temía que pudieran ser lanzados más allá de las fronteras ucranianas para atacar a Rusia, lo que podría arrastrar a Washington y Europa a un conflicto directo con el Kremlin.
Los ATACMS (Sistema de Misiles Tácticos de Largo Alcance), no llegarían hasta el próximo año porque tienen que ser fabricados desde cero, ya que EEUU no pretende en este caso usar su arsenal para fortalecer la capacidad defensiva de Ucrania. Estas armas poseen un alcance de casi 300 kilómetros. Son baterías de misiles de alta precisión fabricados por Lockheed Martin.