MEXICO.- Es difícil hacer que las personas dejen de luchar por llegar a una talla o un peso. Muchas personas incluso toman supuestas medidas rápidas que en realidad son peligrosas. Cada vez son más comunes los casos de personas que se ven afectadas por tomar pastillas para adelgazar.
De acuerdo con especialistas en especialistas en Nutrición Celular Activa y Medicina Integral, el uso de estas pastillas está «ligado a fallas del hígado y riñones, fallas en la glándula tiroides —y por lo tanto desbalances hormonales—, fallas en la función cardiaca que pueden derivar en infartos y fallas en la presión arterial, lo cual puede causar derrames e infartos cerebrales».
¿Podemos decir que en general todas las pastillas para adelgazar son malas para la salud?
Este es un problema que se encuentra a muchos niveles. Es decir, existen termogénicos naturales que sí ayudan a que tu metabolismo comience a trabajar más rápidamente, lo cual, en combinación de una dieta adecuada y una buena actividad física, puede ayudar a conseguir tus metas de pérdida de peso. Sin embargo, el problema viene en el momento en que empresas sin escrúpulos mezclan ingredientes sin importarles la salud de los pacientes, sin estudios que certifiquen que son adecuados para la salud y, por supuesto, con publicidad engañosa. Además, mucha gente piensa que puede terminar con las consecuencias de años de malos hábitos con tan sólo un par de pastillitas diarias, sin detenerse a pensar en las posibles consecuencias.
¿Cuáles son los ingredientes que las hacen peligrosas?
Principalmente, las hormonas tiroideas y anfetaminas. Las hormonas, administradas a diestra y siniestra, causan desbalances muy serios y en el peor de los casos, que la glándula tiroides deje de funcionar, lo que genera problemas de metabolismo que pueden incluso derivar en la muerte. Las anfetaminas te dan la ilusión de contar con más energía. Sin embargo, causan daños serios e irreversibles a tu cerebro: psicosis, depresión, conductas suicidas, delirios, paranoia y dependencia, aunados a un aumento descontrolado de la frecuencia cardiaca y presión arterial. En menor medida, también las combinaciones de algunos ingredientes termogénicos, los cuales son incluidos en cantidades mucho mayores a las que el cuerpo humano puede tolerar.
¿De qué forma actúan la mayoría de estas pastillas?
Principalmente acelerando el metabolismo de los consumidores, lo que causa estados de vigilia más extendidos para dar la ilusión de mayor energía.
¿Cuáles son los principales efectos secundarios de tomar pastillas para adelgazar?
Las pastillas para adelgazar pueden causar múltiples efectos secundarios, como insuficiencias hepáticas agudas y deterioro de la función hepática, las cuales llevan a encefalopatías hepáticas (causados por toxicidad en el cerebro), trastornos de la coagulación, insomnio, nerviosismo, taquicardia, agitación, vómitos, angina de pecho, aumento de presión sanguínea, aumento del ritmo cardiaco, desbalances tiroideos, mareos, náuseas, dolores de cabeza, derrames cerebrales y finalmente, también pueden causar la muerte.
¿Es seguro tomar pastillas para adelgazar si un médico especialista lo receta?
No recomiendo tomar pastillas aunque estén recetadas, porque me he encontrado con recetas de medicamento que están controlados pero que al final no enseñan al paciente a cambiar de hábitos. Tarde o temprano traen consecuencias. A veces hasta profesionales de la salud consideran algunos medicamentos para ayudar a pacientes a tener resultados rápidos, lo cual se me hace una falta de ética.
¿Es probable que las personas que hayan tomado pastillas para adelgazar presenten problemas futuros?
¡Por supuesto! En muchas ocasiones los problemas se siguen viendo años después de su consumo, sobre todo en quienes sufrieron problemas con la tiroides. Pueden tener problemas de infertilidad, disfunción sexual y migrañas durante mucho tiempo.
Además del ejercicio y una dieta sana, ¿qué pueden hacer las personas que buscan bajar de peso?
Existen diversos suplementos naturales que ayudan y complementan todas las acciones que llevamos a cabo con un cambio de alimentación. Por ejemplo, las semillas de hemp y la chía ayudan a mejorar la digestión; el té de jengibre ayuda a metabolizar la grasa más rápidamente; combinar los alimentos adecuadamente también es básico para normalizar las funciones de tu organismo. ¡Existen muchas opciones!
¿Por qué a pesar de todos los casos de enfermedades y muertes que causan estos productos, los seguimos viendo el mercado?
Desafortunadamente, por la ley de la oferta y la demanda. La gente está siempre esperanzada a realizar la ley del mínimo esfuerzo y a obtener resultados casi mágicos. Seguramente suena maravilloso poder comerte una hamburguesa doble con queso tres veces a la semana pero que las pastillas sean quienes lleven toda la carga de la responsabilidad de la pérdida de peso. ¡Eso no funciona! Además es una industria millonaria, y quienes están a cargo de ella, no van a dejar perder a la gallina de los huevos de oro, aunque haya quienes se vean severamente dañados por su irresponsabilidad.
Un consejo para las personas que están desesperadas por bajar de peso.
Lo primero, es que tienen que entender que perder peso es una consecuencia de un cambio de hábitos radical. No hay soluciones mágicas, pero cuando decides a tomar acción y control de tu salud, los mismos resultados te van animando a no aflojar la rienda y a continuar esforzándote.