ESTADOS UNIDOS.- La farmacéutica estadounidense Danco Laboratories, fabricante de la píldora abortiva mifepristona, solicitó este viernes al Supremo de EE.UU. que anule la sentencia de un tribunal de apelación por la que se limitaría el acceso de las mujeres al fármaco a partir de la séptima semana de gestación.
«Para las mujeres y las adolescentes, los proveedores de atención sanitaria y los estados (…) este caso es tremendamente importante», afirmó la abogada de los laboratorios Danco, Jessica L. Ellsworth, en el documento judicial presentado este viernes.
La decisión llega un mes después de que un panel de tres jueces de un tribunal de apelaciones de EE.UU. para el Quinto Circuito fallara que la píldora continuaría disponible en los estados donde el aborto es legal, pero con diversas restricciones como, su prohibición tras la séptima semana de embarazo o limitando las compras por correo.
La resolución del tribunal de apelaciones quedó en suspenso hasta que el Supremo decida si retoma el caso en octubre, cuando comienza el nuevo ciclo judicial.
La compañía añadió este viernes que también espera que el gobierno federal de EE.UU., que se ha posicionado públicamente en contra de la decisión de la corte de apelaciones, presente una solicitud para acabar con estas restricciones a un fármaco cuyo uso fue aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU.
El Departamento de Justicia de EE.UU. aseguró hace un mes que iba a apelar.
«Si el fallo del Quinto Circuito se mantiene, hará retroceder significativamente la capacidad de las mujeres en todos los estados para obtener la atención médica que necesitan», dijo la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, tras la decisión del Quinto Circuito.
En esta línea, Ellsworth expresó este viernes que se plantean «interrogantes» sobre si un único tribunal federal puede «limitar el acceso al aborto en los estados (de EE.UU.) que lo protegen».
Este caso supone la batalla legal más importante sobre el aborto desde que el Tribunal Supremo revocara el año pasado la sentencia Roe contra Wade, que protegía constitucionalmente el derecho al aborto en EE.UU.
Tras ello decenas de estados gobernados por republicanos han restringido esta práctica.
Según el Instituto Guttmacher, una organización sin ánimo de lucro que apoya el derecho a que las mujeres interrumpan sus embarazos, el 54 % de los abortos en Estados Unidos en 2022 fueron con píldoras abortivas como la mifepristona o el misoprostol.
Planned Parenthood, que defiende una atención médica y reproductiva asequible de alta calidad en el país, calcula que desde entonces 18 de los 50 estados de EE.UU. han prohibido el aborto o lo han restringido severamente.