Santo Domingo.- Murió este sábado el militar constitucionalista Aníbal López, el único “hombre rana” sobreviviente de la Marina de Guerra y que se destacaron en la revolución de abril del 1965 al mando del vicealmirante Manuel Ramón Montez Arache.
Se recuerda que los hombres rana fueron la principal unidad militar que acompañó al coronel Francisco Alberto Caamaño punta de lanza clave de apoyo a la población civil.
El expresidente Leonel Fernández, en ocasión de la publicación en la Cancillería dominicana del libro “La Leyenda de los hombres rana” de Ángel Lockward en noviembre del 2009, decidió reunirlos a finales de diciembre del mismo año: por primera vez vendrían a su patria luego de – para muchos de ellos – un exilio forzado de más de 41 años.
Días antes, llegaron ellos, su comandante Montes Arache murió. Algunos asistieron al sepelio en la base naval de Sans Souci, Aníbal López, entre ellos.
El objetivo era reunirlos y, en atención a sus méritos concederles una pensión como muestra de gratitud de la República, se desvaneció.
Manuel narró y aprobó la referida obra, eligió como su panegirista al autor y éste, en ocasión del cumpleaños de Leonel Fernández el 26 de diciembre, le sugirió un cambio que el entonces jefe del Estado recibió con agrado.
El presidente Fernández instruyó confeccionar el decreto e invitar a todos a un almuerzo, sin la presencia de militares activos ni de civiles, excepto el general Medina y Medina y Ángel Lockward.
Mientras que allí uno a uno le contó al presidente, en detalle, las escaramuzas bélicas de cada miembro de la unidad militar más legendaria, entrenada por ranas italianos, encabezados por Illio Capozzi, muerto en el intento de toma del Palacio Nacional.
Despúes de la tarde, la sorpresa fue la lectura del decreto en el que todos fueron declarados héroes de la patria, reincorporados como oficiales y puestos en retiro.
Tras un error simpático el coronel Aníbal López, se quedó activo y murió hoy con su uniforme.
Los restos de Aníbal López serán expuestos en la Funeraria Blandino.