ESTADOS UNIDOS.- Wall Street terminó septiembre con pérdidas acumuladas en sus principales indicadores a medida que la posibilidad de un cierre del Gobierno en Estados Unidos se vuelve cada vez más cierta.
Fue además el peor mes del año para el índice S&P 500 y para el tecnológico Nasdaq, que registraron caídas del 4,9 % y del 5,8 %, respectivamente. El Dow Jones de Industriales cedió un 3,5 % en septiembre.
Los malos datos se producen pese a las renovadas esperanzas de los inversores de que la Reserva Federal estadounidense (Fed) haya llegado ya al límite de sus subidas de tipos, después de conocerse este viernes que el índice de gastos de consumo personal (PCE) subyacente, el indicador preferido de la Fed para medir la inflación, se ha ralentizado hasta el 0,1 % en agosto en términos mensuales.
Sin embargo, el miedo a los efectos en la economía de un cierre continuado de la Administración acabaron lastrando a la bolsa.
«Aunque el mercado se ha vuelto cada vez más insensible a lo que desgraciadamente se ha convertido en una característica recurrente de la política estadounidense, el impacto en la economía real no siempre es trivial», dijo hoy en un análisis sobre el tema Gilles Moëc, economista jefe en AXA IM.
Moëc concedió que, de momento, es imposible saber cuánto durará el más que previsible cierre del Gobierno a partir de este fin de semana, pero alertó de que el último, entre diciembre de 2018 y enero de 2019, que duró 45 días, le costó a la economía estadounidense un 0,1% del PIB en el cuarto trimestre de 2018 y un 0,2 % en el primer trimestre de 2019.
Una consecuencia que podría tener además la situación es que las agencias federales que se encargan de recoger y analizar los datos sobre la economía dejarán de funcionar, por lo que la Fed podría tener problemas para tomar su próxima decisión sobre los tipos, en noviembre.
Si los legisladores estadounidenses no alcanzan un acuerdo político para financiar las agencias federales antes del final de este sábado, la Administración cerrará una gran parte de sus servicios.
A todo esto se suma la situación de la huelga del sindicato de trabajadores del sector del automóvil (UAW), que afecta a las tres grandes empresas del sector en el país, General Motors, Ford y Stellantis.
El sindicato anunció hoy que extenderá su huelga contra Ford y GM. Ayer indicaron que su objetivo es un aumento de sueldo del 30 %, algo menos de lo que pedían inicialmente, aunque por encima del 20 % que han propuesto las compañías.
Los malos datos de la bolsa llegan después de un agosto que ya de por sí fue malo y donde el S&P 500 y el Nasdaq ya tuvieron el que fue entonces su peor mes del año. Por sectores, hoy predominaba el rojo, especialmente en la energía y el sector financiero, aunque con algunas ganancias en el tecnológico y el de bienes raíces.