ESTADOS UNIDOS.- Payton Shires, una trabajadora social de 24 años de Ohio, se encuentra actualmente bajo custodia enfrentando cargos adicionales por intimidación de testigos, tras ser acusada de tener relaciones sexuales con un niño de 13 años.
Según los registros judiciales, Shires compareció ante un juez la semana pasada y se le leyeron los nuevos cargos relacionados con intimidación de testigos. De acuerdo con Fox News, así lo informó la cadena radial ABC WSYX de Columbus.
La orden de arresto fue emitida el 26 de octubre, y Shires fue procesada en el tribunal el 28 de octubre.
Durante la audiencia, los fiscales informaron que Shires se presentó en la casa del niño de 13 años portando un arma y profirió amenazas de suicidio, culpando a la familia del menor por lo que considera la ruina de su vida.
Comparecencia
El caso se desencadenó cuando la madre del niño descubrió mensajes de texto sospechosos en el teléfono celular de su hijo y llamó a la policía el 27 de septiembre.
Tras una investigación, se encontró un video que implicaba a Shires y al adolescente en conducta sexual, y el joven confirmó haber tenido relaciones sexuales con Shires en varias ocasiones durante el mes de septiembre en diferentes lugares de Columbus.
Un giro clave en el caso ocurrió cuando la policía organizó una llamada telefónica controlada y grabada entre la madre del adolescente y la acusada. Durante esta conversación, Shires admitió su participación en actos de conducta sexual con el menor, lo que reforzó aún más las acusaciones en su contra.
Inicialmente, Payton Shires fue arrestada por conducta sexual ilegal con un menor y se le fijó una fianza de $500,000, según detalla Fox News.
Sin embargo, debido a los nuevos cargos de intimidación de testigos, su fianza ha sido revocada, y se espera que permanezca bajo custodia hasta su próxima comparecencia ante el tribunal programada para el 6 de noviembre.
Shires, quien anteriormente trabajaba en el Programa Nacional de Defensa de la Juventud (NYAP), una organización que brinda asesoramiento, trabajo social y defensa a las familias involucradas en el sistema de cuidado de crianza, enfrenta un proceso legal complejo que continúa generando preocupación en la comunidad.
El NYAP había emitido un comunicado en el que expresó su tristeza por el incidente y su compromiso de colaborar con las autoridades en la investigación. “Proteger a los niños es responsabilidad de todos”, indicaron.
