ESTADOS UNIDOS.- El tercer debate de aspirantes republicanos a las presidenciales de 2024 en EE.UU. tendrá lugar este miércoles en Miami con apenas cinco candidatos y sin el gran favorito en las encuestas, el expresidente Donald Trump, que por tercera vez prefiere ausentarse y hacer un evento paralelo en Florida.
Llegan al penúltimo debate -el final será en Alabama en diciembre próximo- el gobernador de Florida, Ron DeSantis; la exgobernadora de Carolina del Sur Nikki Haley; el empresario Vivek Ramaswamy; el exgobernador de Nueva Jersey Chris Christie, y el senador de Carolina del Sur Tim Scott.
El reducido grupo podrá facilitar «una discusión más profunda sobre cuestiones importantes que afrontan los votantes indecisos», dijo a EFE a Aaron Kall, experto en Ciencias Políticas de la Universidad de Michigan.
Subrayó que la política exterior probablemente será un foco importante, ya que no ha habido ningún otro desde que recientemente se intensificaron los combates en el Medio Oriente y debido a que la financiación del Congreso para Ucrania sigue al borde del abismo.
Tras los debates de agosto y septiembre pasado en Wisconsin y California, respectivamente, la atención está puesta este miércoles en el Adrienne Arsht Center para las Artes Escénicas de Miami, una nueva oportunidad para que alguno de los candidatos amarre la segunda posición, que ha estado en manos de DeSantis, pero con varios bajones en el camino.
Kall señaló que DeSantis y Haley «competirán por ser la última alternativa creíble al favorito Trump para la nominación republicana».
Subrayó por otro lado que el gasto en Ucrania y la política de refugiados palestinos son dos temas en los que ambos tendrán la oportunidad de avanzar en Miami.
Por otro lado, el académico señaló que el reciente respaldo de la gobernadora de Iowa, Kim Reynolds, debería dar a DeSantis algo de impulso en el debate, donde además tiene la ventaja de jugar en casa si surge alguna pregunta sobre Florida.
Por otra parte, el analista político republicano Alfonso Aguilar dijo hoy a EFE que Trump ha demostrado que ha sido «acertada» su estrategia de no participar en los debates ante la abrumadora ventaja que mantiene en las encuestas.
Su ausencia «no ha tenido ningún impacto en su campaña», señaló.
Trump planea de nuevo robar el protagonismo del debate con su ausencia y la contraprogramación de un mitin prácticamente a la misma hora del debate en Hialeah, una ciudad aledaña a Miami de amplia población de origen cubano.
Además, en una encuesta divulgada el domingo por The New York Times, Trump además supera a Biden, en Nevada, Georgia, Arizona, Michigan y Pensilvania, estados clave para las presidenciales de 2024.
En esta ocasión el Comité Nacional Republicano (RNC) endureció las condiciones para debatir y los candidatos debieron alcanzar una intención de voto de al menos un 4 % en dos encuestas a nivel nacional o alternativamente un 4 % en un sondeo nacional, además de 70.000 donantes únicos, entre otros requisitos.
Otra ausencia en este debate será la del exvicepresidente Mike Pence, quien el pasado 28 de octubre anunció por sorpresa que retiraba su candidatura de las primarias.
Según el termómetro de popularidad elaborado por la web especializada FiveThirtyEight, la media de encuestas otorga a Trump el 58,4 % de posibilidades para la nominación republicana, con gran ventaja sobre DeSantis (13,6 %) y Haley (7,8 %).
El empresario Ramaswamy apenas alcanza el 5 % y, en la cola, Christie y Scott presentan cifras insignificantes, 2,3 y 1,6 %, respectivamente, según las proyecciones de la citada web.