SANTO DOMINGO.- Durante este martes el Ministerio Público ha desvelado detalles claves en el escenario del asesinato de la venezolana Yenny Carolina Pérez Canelón, cuyo cuerpo fue descubierto descuartizado en un apartamento en el sector Piantini, Distrito Nacional.
Las pruebas recopiladas apuntan a una minuciosa premeditación del crimen, resaltando objetos como una pistola Glock modelo 45 con silenciador, varios cuchillos, juego de esposas, larga soga y pastillas Diazepan, que sirven como un sedante.
Las evidencias recopiladas en el apartamento, alquilado por un ciudadano italiano de nombre Michael Saba, apuntan a que el acusado preparó minuciosamente el escenario para sedar y posteriormente atar a la víctima antes de asesinarla.
El apartamento, situado en el piso 11 del edificio 39 de la torre Suites by Refa, fue rentado a través de Airbnb, pero curiosamente a nombre de Wilfredo José Camilo Morel, lo que indica un intento de Saba de ocultar su identidad.
Pérez Canelón llegó al apartamento alrededor de las 12:17 a.m. del día del crimen, acompañada por su taxista de confianza, Manuel Antonio Rosario Santana, alias Junior.
La joven, supuestamente retrasó su salida por el temor de ser vista por un conocido que había llegado al edificio.
Al día siguiente, su cuerpo desmembrado fue encontrado en el mismo lugar.
Los hallazgos incluyen también la maleta donde fue encontrado el torso de la víctima, lo que fortalece la teoría de que el asesinato fue cuidadosamente planeado y ejecutado con una premeditación alarmante.
Estos descubrimientos arrojan luz sobre la brutalidad y la intención deliberada detrás del asesinato de Pérez Canelón.