BRUSELAS. La Comisión Europea (CE), anunció este lunes una multa de 1.840 millones de euros al gigante tecnológico Apple por imponer desde la App Store restricciones a competidores de su servicio de música en ‘streaming’, como Spotify, que en la práctica les impidieron informar a usuarios de iPhone y iPad sobre opciones de suscripción de música más baratas fuera de la aplicación.
«Durante una década, Apple ha abusado de su posición dominante en el mercado para la distribución de servicios de ‘streaming’ de música a través de la ‘App Store’. Es ilegal y ha impactado a millones de consumidores europeos que no han podido elegir libremente», explicó la vicepresidenta ejecutiva de la Comisión Europea responsable de Competencia, Margrethe Vestager.
Bruselas, que considera la multa «proporcional a los ingresos globales de Apple» (supone un 0,5 % de su facturación anual) y «necesaria para asegurar que disuade», ha ordenado a la empresa que lidera Tim Cook que retire las restricciones a sus competidores y que se abstenga de adoptar prácticas similares en un futuro.
Bruselas ha considerado que Apple posee una posición dominante en el mercado porque la única forma que tienen los usuarios de un iPhone o un iPad de descargarse aplicaciones de música en línea, como por ejemplo Spotify -que fue quien interpuso la denuncia en 2019-, es a través de su propia tienda, la App Store.
Apple cobra a sus competidores una comisión del 30 % sobre los planes de suscripción que ofrecen a los usuarios, a los que solo han podido llegar a través de la App Store, al tiempo que estos competidores trasladan el recargo de precio a los usuarios y convierten las opciones alternativas en más caras que Apple Music, la propia aplicación que viene instalada por defecto en los iPhone y iPad.
Bruselas ha encontrado que las normas de la App Store impiden a la competencia de Apple Music informar a los usuarios de iOS sobre los precios de las suscripciones fuera de la propia App Store o las diferencias de precio, incluir enlaces con el sitio web del servicio alternativo o ponerse en contacto con usuarios recientes para informarles de las alternativas.
Estas prohibiciones «no son ni necesarias ni proporcionales para la protección de los intereses comerciales de Apple», considera Bruselas, que también determinó que «afecta los intereses de los usuarios de iOS» al impedirles tomar decisiones informadas sobre dónde y cómo comprar suscripciones de música en ‘streaming’.
«La conducta de Apple, que duró casi diez años, puede haber llevado a muchos usuarios de iOS a pagar precios mucho más elevados por suscripciones de música en ‘streaming’ debido a la comisión impuesta por Apple a los desarrolladores y repercutida a los consumidores en forma de precios de suscripción más elevados por el mismo servicio», explicó la Comisión Europea en un comunicado.