ESTADOS UNIDOS.- La Oficina de Derechos Humanos de la ONU ha publicado este jueves un informe en el que pide medidas inmediatas y audaces para abordar el problema «cataclísmico» de Haití. En su escrito, señaló también que el cierre de la frontera con República Dominicana como un agravante de los problemas médicos y alimentarios en Haití.
En su comunicado, Naciones Unidas expresa que «la corrupción, la impunidad y la mala gobernanza, sumadas a los crecientes niveles de violencia de las pandillas, han erosionado el Estado de derecho y han llevado a las instituciones estatales… al borde del colapso». Además, indican que la población haitiana se ve «gravemente privada de sus derechos humanos».
Junto al comunicado, la ONU ha adjuntado un vídeo en el que aparece Volker Türk, alto comisionado de la Oficina de Naciones Unidas para los Derechos Humanos. En este documento audiovisual, Türk señala que «mujeres han sido forzadas a tener relaciones sexuales con pandilleros» y que «niños siguen siendo reclutados y abusados». Además de esto, el alto comisionado ha señalado el problema de seguridad y gobernabilidad y ha instado a «una misión multinacional de seguridad para ayudar a la Policía Nacional a frenar la violencia».
De esta forma, con el vídeo difundido por las Naciones Unidas, la ONU pide de forma directa una intervención militar para frenar la violencia en el país.
En el informe de 15 páginas, República Dominicana aparece en dos ocasiones. En los apartados de «acceso a servicios básicos» y el de «acceso a la salud». El 44% de la población haitiana sufre de inseguridad alimentaria. Eso implica a 4.35 millones de personas. Según Naciones Unidas, «el cierre de la frontera con República Dominicana ha intensificado» estos problemas: el de acceso a la comida y a medicamentos.
El informe también trata temas importantes como el acceso a la educación, que ha sido afectado por el conflicto. «La violencia de las pandillas ha forzado a algunas escuelas a cerrar. Las pandillas han atacado a niños, profesores y a padres dentro de la escuela», concretan en el escrito.
Las tres últimas páginas del informe están dedicadas a resumir el problema en Haití y dar recomendaciones a las autoridades haitianas. En el primer punto, instan a «fortalecer la Policía Nacional Haitiana, dando equipamiento adecuado para responder a la violencia de las bandas; proteger los edificios públicos, en especial los que brindan servicios a los ciudadanos; y asegurar el respeto a los Derechos Humanos«.
Además, para contrarrestar el daño de las pandillas, recomiendan «fortalecer la ayuda médica y psicológica para supervivientes de violencia sexual«.
Para evitar que los jóvenes se sumen a la violencia o la sufran, aseguran que hay que «implementar medidas para proteger a los niños de la violencia de las pandillas y el reclutamiento».
Por último, para que el gobierno provisional de Haití impida el fortalecimiento de las pandillas, recomiendan «incrementar la inspección de todos los cargamentos que llegan a Haití» para evitar la entrada de armas y municiones.
De esta forma, con un comunicado contundente junto a un vídeo directo y conciso, la ONU pide de forma formal ayuda militar para intervenir en Haití y ayudar a la Policía Nacional. De nuevo, República Dominicana queda señalada por Naciones Unidas por la decisión de mantener cerradas las fronteras.
