Redacción.- La Organización Mundial de la Salud (OMS) conmemoró este jueves el Día Internacional contra la Malaria, una enfermedad que aún causa más de 600.000 muertes anuales especialmente en África, con un nuevo llamamiento a intensificar los esfuerzos para intentar eliminar esta enfermedad antes de 2030, como marca uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
“La malaria sigue siendo un grave desafío para la salud global”, destacó en un comunicado el director del programa de la OMS contra la enfermedad, Daniel Ngamije, quien subrayó que la lucha puede acelerarse si se logra otro objetivo largamente defendido por la agencia sanitaria, implantar la cobertura sanitaria universal. Nuevas herramientas contra la enfermedad, como vacunas o redes antimosquitos de dos ingredientes, pueden servir para combatir una enfermedad que afecta a los más vulnerables, recordó Ngamije. “
Los niños de familias pobres en el África subsahariana son de manera desproporcionada los más afectados por la enfermedad, que también tiene entre los grupos de riesgo a mujeres embarazadas, refugiados, migrantes y pueblos indígenas”, subrayó.
Según las últimas cifras completas de la OMS, en 2022 se registraron 249 millones de casos globales de malaria, entre ellos 608.000 mortales, y África concentra más del 90 % de los contagios y los fallecimientos. “Las desigualdades también obstaculizan los esfuerzos para dar los últimos pasos hacia la eliminación de la malaria”, subrayó el experto de la OMS.