REDACCIÓN.- Ascienden a 96 los muertos debido a las inundaciones causadas por las fuertes lluvias en el sur de Brasil y un millón y medio de damnificados, en vísperas de nuevas precipitaciones que van a afectar aún más a la región, según informaron las autoridades regionales de ese país.
La Defensa Civil ha contabilizado hasta el momento 131 desaparecidos y 362 heridos por las lluvias torrenciales sin precedentes que afectan principalmente al estado de Río Grande do Sul.
El anuncio de nuevos temporales a partir de este miércoles, y que serán más fuertes entre el viernes y el domingo, tiene en alerta a las autoridades que preparan desde ya las medidas de contingencia.
Según el Instituto Nacional de Meteorología (INMET), en los próximos días se esperan “fuertes lluvias y tormentas” en el área más austral del estado de Rio Grande do Sul, en toda la zona fronteriza con Uruguay, debido a la llegada de un frente frío.
El gobernador hizo un llamado a los habitantes de municipios que ya fueron afectados y que posiblemente volverán a caer en la mira de las lluvias para que permanezcan en los albergues y solo regresen a ver lo ocurrido con sus hogares cuando las autoridades confirmen total seguridad para sus vidas.
“No es hora de volver a la casas ni de estar en los sitios que fueron afectados”, señaló el gobernador, quien además advirtió que las nuevas precipitaciones van a tener incidencia en varios municipios y en la zona metropolitana de la capital, Porto Alegre, donde se prevén deslizamientos.
Rio Grande do Sul ha sido el estado de Brasil más azotado por las lluvias, con al menos 95 víctimas mortales, mientras que el vecino estado de Santa Catarina registró un fallecimiento.