Beacon: Conoce al perro terapeuta que alivió estrés a atletas de París 2024
Redacción.- En redes sociales se ha vuelto famosa la historia de Beacon, un golden retriever de cuatro años,que aparece siendo abrazado por las gimnastas del equipo nacional de Estados Unidos.
«Beacon no es el único perro», comentó a Jill Geer a USA TODAY, directora de comunicaciones y marketing de USA Gymnasts. «Hay varios otros perros, pero Beacon es 100% la estrella del espectáculo.
Beacon ha sido entrenado como perro terapéutico
Beacon nació en febrero de 2020 en Michigan y fue adoptado cuando tenía 8 semanas por Tracey Callahan Molnar, de 65 años, exentrenadora de gimnasia rítmica. Molnar explicó para USA TODAY que Beacon es el segundo golden retriever que adopta, y que ella y su difunto esposo tuvieron anteriormente un perro llamado Tulsa, que falleció en 2019.
«Después de perder a Tulsa, no sólo lo extrañé a él, sino brindar terapia con mascotas«, dijo Molnar. «Soy una gran defensora del voluntariado y lo he hecho durante muchos años en diferentes vías y es algo que espero seguir haciendo».
Cuando Molnar adquirió a Beacon, esperaba que él también disfrutara de ser un perro de terapia porque no es algo a lo que se pueda obligar a una mascota. Pero, afortunadamente, se acerca a la gente. De acuerdo a Molnar le gustan mucho los perros, pero ama a las personas. Considera que es muy bueno para detectar el estrés en las personas.
Hay más perros en el programa terapéutico en las gimnastas de EEUU
Molnar, quien ha estado vinculada con USA Gymnastics durante más de 40 años, mencionó en la entrevista que Caroline Hunt, vicepresidenta del programa de gimnasia rítmica de USA Gymnastics y exatleta profesional, había pensado en introducir un programa de terapia con mascotas en su departamento inspirándose en un evento al que asistió hace unos años.
El programa de terapia con perros, iniciado por Hunt, comenzó en febrero de 2023 durante un programa de gimnasia rítmica en Indianápolis, pero Molnar dijo que muchos de los que tenían dudas apreciaron la iniciativa y preguntaron si volvería a suceder.
«Vieron el beneficio. Escucharon a sus hijas o a sus gimnastas hablar de lo mejor que se sentían, de lo más tranquilas que se sentían al entrar a la pista de competencia y atribuyeron el mérito de poder pasar tiempo con los perros de terapia antes de la competencia».