ESTADOS UNIDOS.- El 31 de marzo de 2020 Ryan Grantham disparó en la nuca a su madre, Barbara Waite. Contaba con 22 años y tenía a sus espaldas un currículum audiovisual que le había llevado a participar en proyectos como Sobrenatural, iZombie o El imaginario del Doctor Parnassus de Terry Gilliam, obteniendo papeles de mayor protagonismo en la adaptación live action de El diario de Greg en 2010, e interpretando a Jeffrey Augustine en la cuarta temporada de Riverdale, allá por 2018. Según asesinó a su madre, de 64 años, en la casa familiar de Squamish al norte de Vancouver, Grantham planeó atentar contra la vida del primer ministro Justin Trudeau, o bien realizar ataques masivos en la Universidad Simon Fraser y el puente LionsGate. Desistió antes de hacer nada, y optó por entregarse.
Así es como Grantham acudió a la comisaría más cercana diciendo “he matado a mi madre”. Dos años después, y luego de un complejo proceso judicial, Grantham ha sido condenado a cadena perpetua por matricidio, según recogen medios como Deadline. El joven intérprete no podrá pedir la libertad condicional hasta transcurridos 13 años en presidio, luego de haber recibido una sentencia por asesinato en segundo grado a manos del Tribunal Supremo de la Columbia Británica. El jurado presidido por Kathleen Ker, así, resolvió la sentencia este 21 de septiembre. Las leyes de la provincia canadiense no dejaban otra opción que la perpetua, aunque sí permitieron discutir en qué punto Grantham podía solicitar la condicional. Su equipo de abogados pidió originalmente 12 años.
Puesto que el código penal contempla posibilidad entre los 10 y 25 años según se haya entrado en prisión, la lucha de los defensores de Grantham ha permitido que el intérprete (nominado a los premios Leo) pueda aspirar a la libertad condicional cuando cumpla 14 años entre rejas. En el juicio destinado a aclarar lo sucedido, Grantham detalló las circunstancias del asesinato y reveló que había grabado en vídeo el cadáver de su madre antes de entregarse. Originalmente fue acusado de asesinato en primer grado y puesto en prisión preventiva desde mediados de 2020, mientras que en los últimos dos años y medio se desarrollaban las pesquisas de abogados y jueces. Ahora será conducido a un centro más permanente.
En marzo de 2022, Grantham llegó a pedir disculpas por lo sucedido ante los medios: “Ante algo tan horrible pedir perdón parece inútil. Pero desde cada fibra de mi ser, lo siento”.