ARGENTINA.- Ariel Omar Pérez, el hombre de 39 años acusado de matar a puñaladas su expareja mientras trabajaba en el cementerio del Departamento de Angaco, San Juan, se negó este martes a declarar ante el juez de la causa, quien además le dictó una prisión preventiva de un año mientras continúa la investigación. Además, quedó formalmente imputado del “homicidio doblemente calificado por el vínculo y por mediar violencia de género” de Yanina Gabriela Pérez (43), cometido el jueves pasado en ese municipio ubicado 18 kilómetros al noroeste de la capital provincial.
Con un fuerte operativo de seguridad y en un recinto repleto, Pérez, apodado “El bebé guascazo”, fue sometido a la audiencia de formalización de la investigación penal preparatoria ante el juez de Garantías Sergio López Martí, según le informaron fuentes judiciales a Télam.
El fiscal de la causa, Adrián Riveros, durante la audiencia describió el hecho que se le imputa al acusado -que lo vivió esposado y custodiado por personal policial- y la calificación legal del mismo, delito que prevé la prisión perpetua.
El fiscal también enumeró una serie de pruebas recolectadas que comprometen al imputado. Entre ellas, los dichos de dos testigos presenciales del femicidio, uno de los cuales observó el momento en el que Pérez apuñaló a la mujer.
También destacó que mientras que el sospechoso estuvo prófugo se obtuvieron escuchas telefónicas en las que el hombre se comunicó con otra expareja -con quien tiene cuatro hijos y a la que en 2020 atacó en la calle, hecho por el que lo condenaron a 1 año de cárcel- y un amigo, a los que les reconoció haber cometido el femicidio.
De acuerdo a los informantes, en un mensaje de WhatsApp enviado desde la clandestinidad, el acusado habría dicho que la mató porque lo “tenía cansado con sus amenazas”.
Además, el fiscal describió que la autopsia reveló que la víctima sufrió ocho heridas de arma blanca en distintas partes del cuerpo, una defensiva en una mano y otra en el hígado, que fue la que más le afectó el organismo y le provocó una masiva pérdida de sangre, detallaron los voceros.
Según las fuentes, para la fiscalía aún resta producir más pruebas, por lo que la investigación continuará. De hecho, el arma blanca utilizada para consumar el femicidio todavía no fue hallada por los pesquisas ya que se cree que el imputado la descartó tras su huida.
Por su parte, el acusado se abstuvo de declarar ante el juez Marti, quien finalmente dispuso que quede alojado durante 12 meses en el penal de Chimbas.
Al respecto, la defensa particular de Pérez pidió que se extremen las medidas de “seguridad” en el ámbito del Servicio Penitenciario provincial ya que, según él, se viralizaron en las redes sociales unos videos con amenazas de parte de otros detenidos de dicha unidad.
En tanto, la audiencia contó con la presencia de Sixto, hijo de la víctima, y los hermanos de la mujer asesinada, al tiempo que en la puerta de los tribunales sanjuaninos se desarrolló en forma paralela una movilización de familiares, amigos, vecinos y organismos contra la violencia de género en reclamo de justicia y una “pena ejemplificadora” para el autor del hecho.
“Atravesamos todavía un momento muy doloroso, que sólo lo entiende quien lo vive en carne propia y no encuentro palabras para explicarlo”, dijo Sixto al cabo de la audiencia. Y agregó: “Que Dios se apiade de él y que la Justicia haga lo que tenga que hacer, y que él se las arregle con el de abajo.”
Yanina Pérez, empleada de la Municipalidad de Angaco, fue asesinada cerca de las 10.30 del jueves 15 de febrero, cuando realizaba tareas de limpieza en el cementerio local.
Según el fiscal Riveros, la víctima fue atacada allí por su expareja, por lo que comenzó a gritar. Compañeros de trabajo la auxiliaron y trasladaron hasta un hospital de la zona, donde falleció producto de las heridas recibidas.
Tras el crimen, los testigos del crimen reconocieron al agresor como la ex pareja de la mujer, por lo que la Policía salió en su búsqueda.
El intendente de Angaco, José Castro, decretó un duelo de 24 horas en el municipio y envió, en un comunicado de prensa, “su más sentido pésame por el fallecimiento de la compañera de trabajo, Yanina Pérez, quien desempeñaba funciones como Coordinadora de Tareas en el Cementerio Departamental”.
Durante la búsqueda del acusado, la policía sanjuanina allanó su vivienda en busca de pistas y en se halló su documento de identidad, entre otros elementos de interés para la investigación.
Pérez, quien según fuentes judiciales tenía antecedentes penales y al menos una causa por violencia de género contra otra ex pareja, se presentó el domingo pasado ante las autoridades y quedo detenido.
En un fallo de 11 páginas al que accedió Télam, el Quinto Juzgado Correccional de San Juan homologó el 20 de octubre de 2020 un juicio abreviado en el que la fiscalía y la defensa acordaron una pena de 1 año de prisión de cumplimiento efectivo por el delito de “lesiones leves agravadas por el vínculo”.
Ese hecho ocurrió el 14 de enero de 2020, cuando el hombre, que había salido de la cárcel en diciembre de 2019 tras purgar una condena previa también de un año, atacó a su ex concubina y madre de sus cuatro hijos cuando llegaba a su casa.
A su vez, en el fallo, el hombre fue declarado reincidente por sus antecedentes penales.