REDACCION- Al menos 41 personas perdieron la vida y varias resultaron heridas en una explosión ocurrida el viernes en una mina de carbón en el noroeste de Turquía.
Este sábado los equipos de rescate concluyeron sus labores tras recuperar el cuerpo del último minero que quedaba dentro.
«Contabilizamos en total 40 muertos. 58 mineros pudieron salvarse por su cuenta, o fueron rescatados por los equipos», declaró el ministro del Interior, Suleyman Soylu, que viajó a la mina de Amasra, en la costa del mar Negro. Inicialmente se reportaron 40 víctimas y horas después el presidente turco, que llegó al lugar, anunció que se había recuperado un último cuerpo.
Según el ministro de Energía, Fatih Dönmez, el fuego en las galerías declarado tras la explosión «está ahora bajo control, en gran medida».
El estallido ocurrió el viernes a las 6:15 pm hora local. Según las autoridades fue una explosión de grisú, un gas incoloro, inodoro, inflamable y venenoso que suele hallarse entre las rocas de las minas de carbón. En ese momento había dentro más de 110 mineros.