REDACCIÓN INTERNACIONAL.- El Gobierno de Alemania dispuso el envío de 14 de tanques de guerra a Ucrania para que los utilice en su guerra contra Rusia.
Estos serán de los tipo Leopard.
El embajador de Rusia en Washington dijo que era «otra provocación flagrante» y consideró que la decisión de Alemania «no traerá nada bueno» y dejará «una marca duradera» en las relaciones entre Berlín y Moscú.
El gobierno ucraniano considera vitales estos vehículos de guerra para enfrentar a las fuerzas invasoras rusas y disputarles territorios.
Alemania también autorizó que otros países puedan enviar sus Leopard 2 a Ucrania. Se calcula que hay unos 2,000 de estos vehículos diseminados por todo Europa.
Las autoridades ucranianas han insistido sobre la necesidad urgente de mayor armamento pesado para enfrentar la invasión rusa y han afirmado que si tuvieran suficientes tanques de batalla podrían recuperar parte del territorio arrebatado.
«No se trata de 5, 10 ó 15 tanques, la necesidad es mayor», dijo el martes por la noche el presidente Volodymyr Zelenskyy, reflejando cierta frustración de Kyiv ante la falta de suministros bélicos por parte de Occidente.
Los alemanes han soportado meses de prolongados debates políticos en medio de preocupaciones de que el envío de tanques escalaría el conflicto y convertiría a la Alianza del Atlántico Norte (OTAN) en protagonista principal de la guerra con Rusia.
Por su parte, Washington argumentó que la alta tecnología con la que están equipados los Abrams requiere de mucha capacitación y mantenimiento.
En las últimas semanas se ha producido un cambio radical en el armamento pesado entregado por Occidente, que incluye cientos de vehículos blindados, sistemas de artillería y munición.