Atacan embajada de Francia en Burkina Faso tras segundo golpe de Estado en África Occidental
REDACCIÓN- Los disparos volvieron a sonar el sábado en la capital de Burkina Faso, en medio de indicios de tensiones persistentes, un día después de que un grupo de militares derrocara al hombre que había tomado el poder en un golpe de Estado apenas nueve meses antes.
Los nuevos líderes de la junta de Burkina Faso pidieron este domingo poner fin de los disturbios, un día después de que manifestantes atacaran la embajada de Francia y otros edificios tras el segundo golpe de estado de la nación de África Occidental este año.
El capitán del ejército de Burkina Faso, Ibrahim Traore, dijo el domingo que la situación está bajo control en la capital e instó a la gente a abstenerse de actos de vandalismo contra la embajada francesa.
El video que circula en las redes sociales no es en el consulado dominicano en Haití como se rumoraba #BurkinaFaso #Haití #NTelemicro5 https://t.co/5wJn0xN3Su pic.twitter.com/JTKmYdH8ql
— Noticias Telemicro (@NTelemicro5) October 3, 2022
Los comentarios se produjeron después de que las fuerzas de seguridad lanzaran gases lacrimógenos contra decenas de manifestantes que lanzaban piedras frente a la embajada de Francia en la capital de Burkina Faso.
Paul-Henri Sandaogo Damiba, quien fue depuesto el pasado viernes, aceptó dimitir y entregarle el poder al capitán Ibrahim Traoré. Antes de hacerlo, instaló siete condiciones que fueron aceptadas, entre las que figuraban la continuidad del proceso de estabilización y compromisos con la CEDEAO. Sin embargo, la organización africana reiteró su preocupación. En tanto que los militares desalentaron las agresiones hacia entidades francesas.
Este domingo 2 de octubre, la situación de tensión en Burkina Faso evolucionó y se dirige hacia una resolución, con la consumación del golpe de Estado perpetrado el pasado viernes.
El teniente coronel Paul-Henri Sandaogo Damiba aceptó renunciar con la finalidad de evitar que escalen las agresiones y se produzcan graves pérdidas humanas y materiales, un gesto que consolida al capitán Ibrahim Traoré y a sus golpistas en el mando.
A través de una mediación de líderes religiosos y comunitarios, Damiba mantuvo contacto con los referentes que realizaron el levantamiento y les comunicó su salida. No obstante, puso siete condiciones para dar un paso al costado, las cuales fueron aceptadas por la nueva Junta Militar.
«El propio presidente Damiba propuso su dimisión para evitar enfrentamientos con graves consecuencias humanas y materiales», afirmaron los mediadores a través de un comunicado
Dentro de las peticiones figuraba la «búsqueda de la reconciliación nacional», la continuación de la lucha contra el terrorismo yihadista, el respeto hacia el «cumplimiento de los compromisos adquiridos» con la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) y garantías de seguridad hacia él y sus colaboradores.
Los mediadores detallaron que el capitán Traoré, de 34 años y presidente del Movimiento Patriótico de Salvaguarda y Restauración (MPSR, junta militar), «aceptó estas siete condiciones». A su vez, llamaron a «la calma, la moderación y la oración» por el país africano, el cual está transitando su segundo golpe de Estado en ocho meses.