Santo Domingo.- El artista colombiano Camilo llenó este viernes el Pabellón de Voleibol de Santo Domingo y llevó al público dominicano a «un lugar feliz» en el que se entonaron y bailaron todos sus temas, especialmente cuando Evaluna saltó al escenario para cantar junto a su marido.
La capital dominicana, que mientras esperaba a Camilo hizo su propio show con las canciones que sonaban del gran icono local Juan Luís Guerra, como ‘El Niágara en bicicleta’, recibió al artista con numerosas pancartas, cintas para el pelo con su nombre y coreando para que saliese al escenario el intérprete colombiano, quien desde el primer momento puso toda su energía para agradar a los asistentes.
«Buenas noches Santo Domingo, buenas noches ‘Tribu’, esta noche es nuestro lugar feliz», dijo el cantante de 30 años para presentarse a un público que siempre ha sido fiel a sus visitas al país caribeño y al que tiene mucho aprecio.
Con ‘Bebé’, el antioqueño dio inicio a un concierto correspondiente a la gira «Nuestro lugar feliz», con la que llegó a República Dominicana tras actuar en Estados Unidos y con la que finalizará el año en Puerto Rico, México, Colombia y España.
‘Aeropuerto’, ‘Kesi’, ‘Una vida pasada’, ‘Pegao’ o ‘El mismo aire’ fueron las siguientes canciones que entonó Camilo ante un público que estuvo en pie durante todo el concierto y que se sabía prácticamente todas sus letras.
Especialmente emotivo fue cuando cantó ‘La Mitad’, un tema que él mismo, durante la presentación, reconoció que compuso en Samaná, una provincia del noreste de República Dominicana, y que fue prácticamente cantada ‘a capella’ por el público.
Por si fuera poco, y para sorpresa de la gente, apareció Evaluna, su famosa mujer, para cantar con él ‘Plis’ y ‘Por primera vez’, que en su versión original son cantadas por ambos y que terminaron por levantar a cualquier persona que todavía estaba en sus asientos para conseguir el momento más emocionante de la noche.
Ya sin Evaluna en el escenario, puso el colofón a su actuación con ‘Vida de rico’, uno de los temas que le han llevado a ser reconocido internacionalmente y a ganar numerosos premios.
Finalmente, con confetis y globos, toda su banda y él se despidieron del público dominicano. «Yo no sé si me puedo ir de mi casa porque yo casi vivo aquí», fueron sus últimas palabras antes de bajar del escenario.