REDACCIÓN INTERNACIONAL.- El ciclón Freddy dejó al menos 225 fallecidos en la región meridional de Malaw, en África tras barrer Mozambique y Malawi desde finales de la semana pasada y causar miles de desplazados, se alejará este miércoles, lo que supondrá cierto alivio para las regiones azotadas por los aguaceros torrenciales y los potentes vientos.
Más de 45,000 personas continuaban en albergues y alrededor de 1,300 kilómetros cuadrados (800 millas cuadradas) seguían bajo el agua, según el sistema de satélites Copérnico de la Unión Europea.
“Hay muchas víctimas, tanto heridos como desaparecidos o muertos, y el número no hará más que aumentar en los próximos días”, afirmó Guilherme Botelho, coordinador de proyectos de emergencia de Médicos Sin Fronteras en Blantyre. Malawi, que ha estado luchando contra un brote de cólera, podría sufrir un rebrote de la enfermedad, “especialmente porque la cobertura de vacunas en Blantyre es muy pobre”, agregó.
La ONG ha suspendido sus programas para proteger a su personal de las inundaciones repentinas y los deslaves, pero está apoyando el operativo de emergencias en un hospital local.