NUEVA YORK.- Ray Álvarez, conocido pequeño empresario de 90 años dueño de una tienda de dulces en el East Village de Manhattan (NYC), pudo volver al trabajo ayer, luego de haber sufrido una paliza por un hombre que aún sigue prófugo.
Según su testimonio, el atacante fue un hombre que vendía dos cajas de agua mineral afuera de su tienda “Ray’s Candy”, abierta desde hace 49 años, en 1974. El asalto dejó a Álvarez con el ojo izquierdo morado y una herida sobre la oreja izquierda.
Ray Álvarez, conocido pequeño empresario de 90 años dueño de una tienda de dulces en el East Village de Manhattan (NYC), pudo volver al trabajo ayer, luego de haber sufrido una paliza por un hombre que aún sigue prófugo.
Según su testimonio, el atacante fue un hombre que vendía dos cajas de agua mineral afuera de su tienda “Ray’s Candy”, abierta desde hace 49 años, en 1974. El asalto dejó a Álvarez con el ojo izquierdo morado y una herida sobre la oreja izquierda.
Ray Álvarez, conocido pequeño empresario de 90 años dueño de una tienda de dulces en el East Village de Manhattan (NYC), pudo volver al trabajo ayer, luego de haber sufrido una paliza por un hombre que aún sigue prófugo.
Según su testimonio, el atacante fue un hombre que vendía dos cajas de agua mineral afuera de su tienda “Ray’s Candy”, abierta desde hace 49 años, en 1974. El asalto dejó a Álvarez con el ojo izquierdo morado y una herida sobre la oreja izquierda.
Álvarez asegura que el brutal asalto no hizo nada para cambiar sus sentimientos sobre la ciudad: “Todavía amo Nueva York. Amo Estados Unidos y amo Nueva York”, reiteró.
No es la primera vez que el vecindario acude en ayuda de su empresario local favorito. Una campaña reciente de GoFundMe recaudó más de $50,000 dólares para mantener abiertas la tienda, y el pasado 1 de enero se inauguró un mural que representa a Álvarez por su 90 cumpleaños.