REDACCIÓN.- La rumiación es la práctica silenciosa que consiste en darle vueltas a los problemas de manera continuada y que está detrás del 40 por ciento de los problemas de ansiedad y del 30 por ciento de los problemas de depresión, según el estudio ‘Comprender o rumiar nuestras emociones. Análisis de las estrategias silenciosas que nos acercan o apartan del bienestar emocional’, realizado por Línea Directa con una muestra de 1,700 personas de toda España.
Según ha explicado la psicóloga y experta en inteligencia emocional, Ruth Castillo Gualda, durante la rueda de prensa de presentación del estudio, el 40 por ciento de los españoles afirma haber atravesado problemas de salud mental, siendo más prevalentes en mujeres y jóvenes de 18 a 29 años. Además, «la ansiedad (68%) y la depresión (29%) son los problemas más acentuados».
«A pesar de estos datos, el 70 por ciento de la sociedad española sigue pensando que contar cómo nos sentimos o decir que estás atravesando por un problema de salud mental es un tabú», ha afirmado la experta.
Entre las principales causas de la falta de bienestar emocional se encuentran la soledad, causante del 31 por ciento de los problemas de salud mental; los ritmos de vida, causantes del 30 por ciento y la adicción a las tecnologías, que provoca el 22 por ciento de los problemas de salud mental.
Asimismo, la experta ha destacado que, entre las respuestas a los problemas de bienestar emocional hay algunas que son «poco útiles» y que, lejos de solucionar el problema, lo pueden agravar llevando a problemas de ansiedad y depresión. Estas serían: reprimir lo que se siente, rumiar la situación o el problema y desconocer las causas del malestar emocional.
«Hay personas que piensan que cuando controlamos o suprimimos las emociones las estamos manejando pero esto no es así, igual que cuando nos quedamos atrapados en los pensamientos negativos esto en vez de ocuparnos del problema incrementa nuestro malestar emocional», ha explicado la psicóloga.
No obstante, ha señalado que hay otras estrategias que «cuestan un poco más pero que sí acercan al bienestar emocional y están a la base de una mejor salud mental». Entre estas estrategias se encuentran: la identificación y la comprensión emocional, es decir, «reconocer las señales y entender por qué está pasando ese sentimiento», y, por último, «saber tomar distancia y reformular las situaciones y ser conscientes de que no hay una verdad universal a la hora de interpretar una situación».
Por otro lado, la especialista ha indicado que, para mejorar la satisfacción y evitar así problemas de salud mental es bueno llevar a cabo prácticas como: ser conscientes del ego personal, no dejarse arrastrar por los mitos o creencias, buscar las causas que generan malestar y no juzgarse ni culparse continuamente; atender y afrontar aquello que sí es importante; y reevaluar, reformular y tomar distancia de las situaciones difíciles.
NO SABER GESTIONAR LAS EMOCIONES: SUBIDA DEL 40% EN LA VENTA DE ANTIDEPRESIVOS
Por otro lado, el estudio aborda la problemática que conlleva no saber gestionar las emociones al no contar con las estrategias adecuadas para manejar los sentimientos. En este aspecto, esta situación ha provocado una subida en la venta de ansiolíticos y antidepresivos en las farmacias del 40 por ciento en la última década y España está a la cabeza de Europa. Además, los trastornos mentales son la segunda causa más habitual de baja laboral.
«De hecho, extraídos de nuestros datos podemos asegurar que casi 15 millones de españoles, el 41 por ciento ha tomado antidepresivos alguna vez y el 60 por ciento ha acudido a medicación para poder conciliar el sueño», ha asegurado Ruth Castillo.
En este sentido, el psicólogo especialista en Intervención de la Ansiedad y el Estrés, Juan Ramos-Cejudo, ha explicado que los ciudadanos afrontan sus problemas de salud mental pidiendo ayuda a los profesionales sanitarios o tomando medicación, pero ambas situaciones son perjudiciales ya que «la población pide ayuda en muchas ocasiones sin saber lo que están sintiendo y, por tanto, hay una saturación de Atención Primaria».
«Además, España es un país que encabeza la lista de consumo de psicofármacos, en concreto de benzoalcohólicos. El 60 por ciento de la muestra había tomado medicamentos para dormir alguna vez, el 41 por ciento había tomado medicamentos para dejar de estar triste o antidepresivos, etc. Hay una incesante sobremedicación», ha destacado.
DIFERENCIAS POR SEXO Y POR COMUNIDADES AUTÓNOMAS
Por último, el análisis muestra una diferencia entre los trastornos de salud mental de las mujeres y los de los hombres, ya que, tal y como ha explicado Ramos-Cejudo, «es diferente cómo los gestionan puesto que los hombres reprimen más las emociones o tienden a un mayor consumo de sustancias y piden menos ayuda en general y las mujeres presentan peores índices de calidad del sueño y mayor disposición a la inestabilidad emocional».
En este sentido, se pone de manifiesto que «la salud mental tiene género» y debe tratarse de manera diferente ya que problemas como la ansiedad, los pensamientos suicidas o los TCA son más comunes en las mujeres, y, problemas como las adicciones, los trastornos del comportamiento y la bipolaridad, en los hombres.
También se muestra una diferencia en el bienestar emocional por comunidades autónomas, siendo las Islas Baleares (51%), Cataluña (47%) y Cantabria (45%) las comunidades que presentan más problemas de salud mental, frente a La Rioja (30%), el País Vasco y Asturias (33%), que son las que menos problemas presentan.