La Habana.- Cuba recibió este jueves un vuelo procedente de Estados Unidos en el que fueron deportados 61 migrantes irregulares, y con ellos suman 340 las personas devueltas a la isla en 26 operaciones desde varios países de la región en lo que va de año, según informaron medios oficiales.
Este grupo, el primero que llega desde EE.UU. en marzo, está integrado por 52 hombres, siete mujeres y dos menores.
Seis habían salido de la isla por vía marítima y el resto lo hicieron legalmente y después se incorporaron a rutas irregulares para llegar a la frontera estadounidense, detalló un comunicado del Ministerio del Interior (Minint).
Una de las personas deportadas fue detenida tras su devolución a La Habana porque «se encontraba evadido de un centro penitenciario, donde cumplía una sanción por tráfico de personas», añadió el informe.
La primera operación de retorno por vía aérea tuvo lugar -con 123 personas- el 24 de abril de 2023.
Los gobiernos de La Habana y Washington también mantienen un acuerdo bilateral para que todos los migrantes que lleguen por mar al territorio estadounidense sean deportados al país caribeño.
Unos 22.946 cubanos llegaron a EE.UU. en enero pasado, acorde con un informe de la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP por sus siglas en inglés) de ese país.
El CBP añadió que en cuatro meses del año fiscal 2024 -que comenzó el pasado 1 de octubre- han llegado 86.139 cubanos al territorio estadounidense.
Entre enero y febrero de este año también fueron retornados cubanos en vuelos comerciales desde Islas Caimán, Bahamas y República Dominicana.
En 2023, Cuba recibió de vuelta a un total de 5.253 nacionales, en su mayoría procedentes de Estados Unidos, pero también de otros países como México, Bahamas, Belice, Islas Caimán y República Dominicana.
Cuba vive una oleada migratoria inédita tanto por el volumen de migrantes como por su extensión temporal debido a la grave crisis económica que padece con una gran escasez de productos básicos (alimentos, medicinas y combustible), una inflación galopante, cortes eléctricos frecuentes y una dolarización parcial de la economía.