REDACCIÓN- El estado de Georgia, en Estados Unidos, ejecutó el miércoles con una inyección letal a Willie James Pye, un afroamericano de 59 años, condenado por el brutal asesinato de Alicia Lynn Yarbrough hace más de treinta años.
Pye fue ejecutado en una prisión de Jackson, después de solicitar como última comida sándwiches de pollo y hamburguesas.
La defensa del reo presentó una apelación al Tribunal Supremo de Estados Unidos, alegando problemas de procedimiento, pero fue denegada, prolongando la ejecución por cuatro horas.
La defensa solicitó sin éxito clemencia a la Justicia, argumentando la ineficacia y el racismo de su primer abogado de oficio, que no divulgó en el juicio que el acusado tenía una discapacidad intelectual.