REDACCIÓN INTERNACIONAL.- La Policía búlgara encontró a 43 migrantes, incluidos 10 niños, ocultos en una vagoneta en el oeste del país, según dijeron las autoridades el lunes, apenas unos días después de que se encontraran los cuerpos de 18 migrantes escondidos en un camión con madera.
Las 43 personas parecían encontrarse bien pese a haber estado hacinadas en un espacio reducido, indicó la fiscal Natalia Nikolova, que no detalló la nacionalidad de los migrantes.
La semana pasada se encontraron los cuerpos de 18 personas que se habían asfixiado en un compartimento secreto bajo un cargamento de madera en un camión abandonado cerca de la capital búlgara, Sofía.
Otras 34 personas que estaban en el camión sobrevivieron a la odisea, aunque estaban deshidratadas, mojadas y con síntomas de congelación. Todos eran afganos que habían llegado a Bulgaria desde Turquía con la esperanza de llegar a Europa Occidental, según las autoridades.
Borislav Sarafov, director del Servicio Nacional de Investigación búlgaro, dijo que el incidente de la semana pasada era el más mortal en el país relacionado con la inmigración.
Las víctimas estaban “apretadas entre sí como en una lata”, lo que había provocado muertes dolorosas y lentas, señaló, en una “extraordinaria tragedia humana”.