FLORIDA. La División de Manejo de Emergencias de Florida (FDEM, en inglés) advirtió el martes sobre el aumento de recursos materiales y humanos en respuesta al «nivel sin precedentes de desembarcos de migrantes en nuestras costas», y tras la decisión del gobernador, Ron Desantis, de declarar el estado de emergencia.
La FDEM se encuentra en «estrecha comunicación con los gobiernos locales y socios encargados de hacer cumplir la ley»(…), y continuaremos desplegando todos los recursos y mano de obra disponibles» para frenar la «afluencia de migrantes» que llega a los Cayos de Florida, dijo en un comunicado Kevin Guthrie, director de esta división.
La semana pasada el gobernador de Florida, Ron DeSantis, declaró el estado de emergencia y desplegó la Guardia Nacional, a raíz de la llegada de numerosos emigrantes cubanos y haitianos por vía marítima a este estado sureño.
La medida permite movilizar tropas de la Guardia Nacional y destinar amplios y nuevos recursos estatales para enfrentar la ola migratoria que afecta al sur del estado.
El senador republicano de origen cubano Marco Rubio responsabilizó de esta nueva ola migratoria, sobre todo de cubanos y haitianos, a «las políticas de inmigración fallidas» del presidente estadounidense, Joe Biden.
Rubio se reunió este martes con mandos de la Guardia Costera de EE.UU. y del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), entre otras instituciones, y dijo, tras elogiar la «dedicación» de los guardacostas, que «ellos no pueden hacerlo solos» y que la Administración de Biden «debe tomar medidas para hacer cumplir la ley».
Pocas horas después de firmar el republicano DeSantis la orden ejecutiva, la FDEM activó el denominado Centro de Operaciones de Emergencia del Estado y lo situó en el nivel 2, con el fin de facilitar la coordinación de los activos estatales.