Santiago. ― Tras conmemorarse mañana 12 de junio el Día Internacional Contra el Trabajo Infantil los directivos de la fundación Niños con una Esperanza en Santiago externaron nueva vez su preocupación ante la gran cantidad de niños que, en la zona de Cienfuegos, donde opera, son utilizados para el trasiego de estupefacientes y más reciente en la venta de cigarrillos electrónicos, vapes.
Hicieron un llamado a las autoridades competentes a actuar para evitar que la delincuencia juvenil aumente a tal grado que resulte imposible convivir.
El pastor Pablo Ureña, presidente de la fundación Niños con una Esperanza indicó además que resulta penoso el incremento de niños y adolescentes dedicados a delivery’s, plataneros, mecánicos, limpiavidrios, vendedores ambulantes, limpia votas, pedigüeños, y más lamentable aún, a la prostitución sin que se actúe al respecto.