SANTO DOMINGO.– El Ministerio de Relaciones Exteriores de Haití informó ha informado la noche de este viernes que decidió poner fin a las negociaciones en Santo Domingo sobre la construcción de un canal en el río Masacre, luego de la decisión del gobierno dominicano de cerrar las fronteras terrestres, aéreas y marítimas con la vecina nación.
Tras dos días de buscar la conciliación entre las delegaciones de ambas naciones en la Cancillería dominicana, tratando de buscar una salida al impase entre las dos naciones por la construcción de un canal de riego del lado haitiano estas no llegaron a ningún acuerdo.
Las autoridades haitianas dijeron a través de un comunicado que las medidas que tomó el presidente Luis Abinader fueron «desproporcionadas», por lo cual se reunieron con el embajador dominicano en Haití, Faruk Miguel, para que «explicara» la motivación de la decisión «unilateral».
Relaciones Exteriores de Haití dijo que el diplomático dominicano fue recibido por la ministra de Asuntos Exteriores de esa nación, Emmelie Prophete, que «claramente demostró la desaprobación del gobierno haitiano por las medidas que tendrán consecuencias negativas para las relaciones entre los dos países».
También expresó su preocupación por la seguridad de los haitianos en República Dominicana y pidió al embajador dominicano que su Gobierno tome todas las medidas para protegerlos.
Sin embargo, «después de explorar con él las diferentes facetas de la crisis derivada de la reanudación de las obras del oleoducto en el río Masacre, finalmente coincidió con el embajador Miguel en que sólo la vía del diálogo puede permitir a los dos países resolver esta disputa de manera duradera».
Ante estas acciones, Haití defendió su soberanía sobre la explotación de sus recursos naturales, por lo que, “al igual que la República Dominicana, con la que comparte el río Masacre, tiene pleno derecho a realizar capturas (tomas de agua) allí, de conformidad con el acuerdo (bilateral) de 1929”, texto al que las autoridades dominicana han aludido en todo momento para señalar la ilegitimidad de las obras.
Mientras la franja fronteriza se mantiene celosamente custodiada por efectivos militares, cuyo número ha sido incrementado luego de la disposición del jefe de Estado dominicano que ordenó el cierre en la línea limítrofe como respuesta a la insistencia de los haitianos de levantar el canal.
Los militares dominicanos están colocados en posición, prestos a intervenir ante cualquier intento de agresión de estos extranjeros que permanecen concentrados en la frontera del lado haitiano.