Hezbollah dice que repelió el avance de una fuerza israelí “apoyada por excavadoras”
Redacción. ― El grupo chií libanés Hezbollah afirmó este martes que repelió el avance de una fuerza israelí “apoyada por excavadoras” que progresaba hacia la localidad fronteriza de Labbouneh, en una zona en el suroeste del Líbano donde Israel ha movilizado una cuarta división acorazada.
“Cuando una fuerza enemiga israelí avanzó a las 2.00 horas hacia la zona fronteriza de Labbouneh apoyada por excavadoras y maquinaria, los combatientes de la Resistencia Islámica la atacaron con proyectiles de artillería y cohetes, logrando impactos confirmados y obligándola a retirarse”, dijo Hezbollah en un comunicado.
Desde el comienzo de la invasión terrestre, Israel ha difundido vídeos que muestran supuestos túneles y refugios subterráneos utilizados por Hezbollah y que el Ejército del Estado judío se ha comprometido a desmantelar.
Esta es la primera vez que la formación armada informa de choques en Labbouneh, pegada a la zona fronteriza del suroeste del Líbano y donde el Ejército israelí anunció este martes que ha movilizado a la División acorazada 146ª para realizar “actividades operativas limitadas, localizadas y específicas” en territorio libanés.
Este nuevo contingente se suma así a las divisiones 98ª, 36ª y 91ª, que ya operan en las áreas del centro y centro de la frontera entre ambos países, mientras que el diario ‘The Times of Israel’ afirma que el número total de soldados desplegados en el sur del Líbano podría superar ya los 15.000.
La localidad de Labbouneh se encuentra cerca de una posición de la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en Líbano (FINUL) y a entre 3 y 4 kilómetros de distancia de la sede de los Cascos Azules en Naqoura.
Esta fuerza de la ONU ya ha expresado en los últimos días su “profunda preocupación” por las actividades del Ejército israelí cerca de una de sus bases en el sureste de la misma localidad, Maroun al Ras, donde también hay apostado un contingente de los Cascos Azules, que han recibido la orden de mantenerse en sus posiciones.
Precisamente, este martes el Ejército israelí aseguró que se hizo con el control de un complejo de combate de Hezbollah en Maroun al Ras, donde las fuerzas israelíes no han podido progresar debido al embate de la formación armada, que utiliza tácticas de guerrilla y el lanzamiento de cohetes para impedir el avance en el sur del Líbano.