Hong Kong, en alerta máxima por primera vez en 5 años ante la llegada del tifón Saola
REDACCIÓN INTERNACIONAL.- Hong Kong decretó esta noche la alerta máxima de huracán (T10) por primera vez en cinco años ante el seguro impacto del supertifón Saola, una de las tormentas más potentes que han azotado el sur de China en los últimos años.
El Observatorio meteorológico hongkonés señaló que se esperan vientos de 118 kilómetros por hora (km/h) e incluso superiores, pidió a los residentes que permanezcan en sus casas, alejados de ventanas y puertas expuestas y pronosticó que el Saola rozará Hong Kong en torno a esta medianoche, cuando se desplazará a unos 40 kilómetros de la ciudad.
Además, la agencia emitió un aviso ámbar de tormenta a las 19:45 hora local, y advirtió de la posibilidad de graves inundaciones y mareas “históricas”, ya que el nivel del agua en las zonas costeras bajas subirá rápidamente en las próximas horas.
Hasta las 18:00 hora local (10:00 GMT) las autoridades habían recibido 29 informes de árboles caídos y siete de inundaciones, según el rotativo South China Morning Post, que reportó además tres personas heridas.
El tifón, según las autoridades meteorológicas, ha desarrollado una «estructura de paredes de doble ojo» a lo largo de su trayectoria, lo que hace referencia al grueso anillo circular de nubes que rodea el centro de los ciclones tropicales, donde los vientos son más feroces.
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Este tipo de fenómeno ha sido descrito por los expertos como una característica común de las tormentas más potentes, algo que se observa habitualmente en la mitad de los huracanes que azotan el Atlántico y el Caribe.
Hong Kong amaneció hoy paralizada, con colegios, transportes y comercios cerrados, a la espera de la llegada del Saola, que se aproxima a la costa meridional de China, donde podría tocar tierra antes de la medianoche.
A las 19:00 hora local la tormenta se encontraba a 70 kilómetros al este-sureste del centro financiero, al que se acerca con vientos de hasta 120 km/h hacia las proximidades del delta del río Perla.
El gobierno ha activado su sistema de alerta de inundaciones y un centro de emergencia para el pueblo pesquero de Tai O, en la isla de Lantau, donde el nivel del mar podría subir hasta 3,3 metros por encima de la cota cartográfica el viernes por la noche.
Las autoridades advirtieron de que el clima «se deteriorará con rapidez», con posibilidad de graves inundaciones en otras zonas costeras situadas a baja altitud a lo largo de la noche, por lo que recomendó a los residentes que se mantengan a resguardo del litoral.
Con este pronóstico la ciudad se prepara desde el jueves para recibir lluvias torrenciales y fuertes vientos: unas 150 personas fueron evacuadas a albergues provisionales el viernes, mientras en las zonas más bajas, los comercios y vecinos colocaron sacos de arena en las puertas de sus casas y protegieron sus ventanas para evitar destrozos.
La emisión de la excepcional señal de tormenta ciclónica n.º 10 (T10) supone la primera vez desde 2018 en que el observatorio iza el aviso de mayor intensidad y la número 16 desde que en 1946 se implantaron los registros.
La red de transportes es una de las principales afectadas por la llegada del Saola, que ha provocado la cancelación de 460 vuelos, según la Autoridad Aeroportuaria, con las aerolíneas Cathay Pacific, Hong Kong Airlines, HK Express y Greater Bay Airlines entre las más perjudicadas.
Antes de virar hacia China continental, el Saola atravesó el sur de Taiwán, y las bandas exteriores de la tormenta azotaron las ciudades del sur de la isla con lluvias torrenciales.
Previamente había golpeado Filipinas, donde dejó al menos un muerto y decenas de miles de desplazados a causa de las inundaciones. Hong Kong recibe cada año el embate de unos seis tifones, habitualmente en la temporada de junio a octubre, aunque apenas una fracción de ellos se traduce en cierres comerciales o escolares.
El último supertifón que afectó a la ciudad fue el Mangkhut, que en 2018 dejó pérdidas económicas directas estimadas en unos 4.600 millones de dólares hongkoneses (586 millones de dólares estadounidenses, 541 millones de euros).