SANTO DOMINGO.- Este martes los acusados de ser los cabecillas en el caso de desfalco al Estado “Coral”, acudieron ante la jueza del Sexto Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional en busca del cese de la prisión preventiva que se les impuso como medida de coerción hace más de 18 meses.
El pasado mes de noviembre se cumplió el plazo establecido por la ley para mantener encarcelados a los integrantes de la supuesta red de corrupción dentro de los cuerpos castrenses.
Para Cristian Martínez, abogado del mayor general Adán Cáceres, es inevitable la puesta en libertad de su cliente.
Mientras, el Ministerio Público sostiene que los argumentos presentados por las defensas no son suficientes para un posible cese de la prisión o variación de la medida coercitiva.
Junto a Cáceres acudieron a la audiencia la pastora Rossy Guzmán, su hijo Tanner Flete y el coronel Rafael Nuñez de Aza.
Todos señalados por el Ministerio Público de incurrir en asociación de malhechores, estafa contra el Estado, coalición de funcionarios, y lavado de activos provenientes de actos de corrupción.