La mayoría de las muertes por cáncer de mama se deben a un cáncer que se ha propagado a otros lugares, y por lo general el cáncer se propaga primero a un ganglio linfático de la axila, explicó el investigador principal, el doctor Basak Dogan, director de investigación sobre imágenes mamarias del Centro Médico Southwestern de la UT.
Encontrar el cáncer que se ha propagado a un ganglio linfático “es fundamental para guiar las decisiones de tratamiento, pero las técnicas de imágenes tradicionales por sí solas no tienen suficiente sensibilidad” para detectarlo de forma efectiva, señaló Dogan en un comunicado de prensa del centro médico.
Las pacientes con hallazgos benignos en los exámenes de IRM o en las biopsias con aguja con frecuencia deben someterse a una biopsia quirúrgica de ganglios linfáticos de todos modos, porque esas pruebas pueden pasar por alto un buen número de células cancerosas que se han propagado más allá de la mama, dijo Dogan.
Los investigadores entrenaron a la IA alimentando el programa con resonancias magnéticas de 350 pacientes con cáncer de mama recién diagnosticadas que se sabe que tienen cáncer en los ganglios linfáticos.