NY-SD.- La cantante urbana Tokischa Altagracia Peralta, conocida simplemente como Tokischa, se apoderó de la portada de la sección Música de la destacado diario internacional “The New York Times”.
Bajo el título “Tokischa, la nueva rebelde de la música latina, no se detiene”, describe la periodista Isabel Herrera a la polémica artista dominicana en 23 párrafos en una página completa dedicada a la exponente.
“En una noche de mediados de marzo aquí en la capital, una multitud de cientos de asistentes al festival con alas de hadas, pedrería y pintura de arcoíris en la cara comenzaron a cantar. “¡Po-po-la!” gritaron, desplegando la jerga local para vagina. La escena se asemejaba a la convocatoria de un líder de culto, y la agitadora dominicana Tokischa , una rapera conocida por sus letras lascivas y colaboraciones de alto perfil , apareció en el escenario”, así inicia el párrafo de introducción.
Durante la hora siguiente, la intérprete de 26 años rapeó sobre su bisexualidad, placeres carnales y consumo de drogas, todo ello con ritmos de trap y dembow que freían los altavoces. Esa noche llovía en el festival de la Isla de la Luz, esa especie de diluvio caribeño que llega en un santiamén. «¡Quiero mojarme con ustedes!» gritó, saliendo de debajo del toldo del escenario y entre la multitud. Se desabrochó la blusa de color bígaro, dejando al descubierto un sostén de satén cónico de color rosa intenso debajo, y la audiencia chilló.
El suelo, una vez cubierto de hierba, ahora era una carrera de obstáculos de charcos de barro. Nadie parecia preocuparse. Los fanáticos cantaban cada palabra, sus voces audiblemente roncas. Una mujer escaló una cerca de metal, twerking por encima de la multitud. Cuando terminó su actuación, Tokischa, radiante, se quitó las bragas de debajo de la minifalda y se las arrojó a una mujer del público.
Considere esto un ejemplo menor de la provocación que define a Tokischa Altagracia Peralta. Sus letras audaces, que se deleitan con la rebelión lingüística de la jerga dominicana y abrazan la euforia del sexo, son en su mayoría imprimibles. En “Tukuntazo”, se jacta de acostarse con otras mujeres junto a su hombre. En su himno “Yo No Me Voy Acostar” , proclama: “Tengo un montón de molly en la cabeza/tengo una novia que me besa”.