Redacción. − Se consultó a ChatGPT y Gemini de Google para que hiciera un análisis y encontró que los mentirosos tienden a recurrir a un lenguaje que les permite evadir responsabilidades, ganar tiempo o crear una narrativa convincente.
Los resultados arrojados por la inteligencia artificial consultada señalaron que los mentirosos tienden a usar más pronombres en tercera persona como “él”, “ella” o “ellos”. Este recurso les permite distanciarse de la acción o situación en cuestión.
También, es común que eviten el uso de pronombres en primera persona como “yo” o “nosotros”, probablemente para no asociarse directamente con lo que están diciendo.
Además, los mentirosos suelen emplear más adverbios que intensifican o suavizan una afirmación, como “nunca”, “siempre”, “realmente” o “seguro”. Estos términos buscan reforzar una historia para que suene más convincente o auténtica, incluso si no lo es.
Una característica común del lenguaje engañoso es la tendencia a usar frases largas y complicadas. Según las IA consultadas, los mentirosos suelen añadir detalles innecesarios para hacer que su historia parezca más creíble.
Este comportamiento también refleja un esfuerzo consciente por parte de la persona para evitar ser descubierta, porque construir una mentira requiere más esfuerzo cognitivo que decir la verdad.
Sin embargo, este exceso de detalles puede jugar en contra del mentiroso. La inteligencia artificial, al analizar patrones lingüísticos, detecta que las frases complejas contienen inconsistencias que pueden delatar la falsedad de las afirmaciones.