Santo Domingo.- La magistrada Miriam Germán Brito reiteró, como parte del seguimiento del hecho en el que resultaron muertos tres privados de libertad en La Victoria, su interés en que se determine la forma en que fueron introducidas las armas de fuego al interior del penal.
“La magistrada Germán Brito, que da seguimiento de cerca a este hecho, nos reiteró su instrucción para que una investigación determine, de manera oportuna, la forma en que los internos de La Victoria pudieron acceder a las armas de fuego”, aseveró el responsable de la Dirección General de Servicios Penitenciarios y Correccionales (DGSPC).
Germán Brito ha ido sosteniendo reuniones de trabajo con Hernández Basilio e Hilda Patricia Lagombra Polanco, directora de Centros de Corrección y Rehabilitación.
La magistrada lamentó la situación de dolor por la que pasan los familiares de los muertos y de los heridos. Al mismo tiempo, recordó que, para ser superadas, las problemáticas que acumulan los recintos carcelarios durante décadas requieren de la voluntad de toda la sociedad dominicana, así como de los recursos necesarios, dijo Hernández Basilio.
El titular de la DGSPC informó a la procuradora general que un privado de libertad que asumió la mayor responsabilidad en la trifulca será trasladado a otro centro, al tiempo que continúan las pesquisas sobre el hecho violento que comprometió la integridad de los internos y de los custodias.
Cinco de los heridos recibieron impactos de bala, de igual forma que los tres fallecidos. Nueve de los afectados fueron dados de alta desde los tres hospitales que los atendieron y uno continúa en observación, todos en condición estable.
Una vez pasado los hechos, las autoridades penitenciarias, acompañadas de tres fiscales y miembros de la Policía, realizaron requisas simultáneas en las celdas 1 y 2, así como 3 y 4, y ocuparon 23 teléfonos celulares, tres routers para internet y 85 armas blancas de fabricación carcelaria e industrial, así como un total de 119,000 pesos y 21 dólares a seis de los internos del área.
“Debemos reconocer que estos males en La Victoria tienen mucho que ver con un sistema que históricamente ha tenido deficiencias estructurales y estamos hablando de un recinto que ahora tiene una población de más de 7,000 privados de libertad”, afirmó Hernández Basilio.