SANTO DOMINGO.- El Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) informó que a partir de este lunes, ha dispuesto el despliegue de más de tres mil de sus servidores para atenuar los efectos que pudiera causar el paso por el país la tormenta Franklin, los cuales actuarán en brigadas esparcidas por todas las zonas donde los organismos de socorro han señalado como de mayor peligro.
En la reunión encabezada por el ministro Deligne Ascención, el Ministerio se declaró en sesión permanente. Mientras que su incumbente y todos los viceministros y directores tendrán a su cargo la supervisión de las labores de los miembros y equipos del MOPC, a los fines de que los efectos del fenómeno puedan ser los menores posibles.
Equipos y personal de la Comisión Policial y Militar (COMIPOL), de Transportación y Equipos, Mantenimiento Vial, Supervisión y Fiscalización, Coordinación Regional, Programas Especiales, Peón Caminero, Departamento Médico, entre otros, estarán antes, durante y después del paso de la tormenta orientando a la ciudadanía, limpiando imbornales y todo tipo de desagüe, caminos vecinales, desbrozando cañadas, canaletas en las carreteras y caminos, para amortiguar los daños que pudiera ocasionar y salvar vidas como consecuencia de la misma.
El MOPC recuerda el llamado a la ciudadanía a estar pendiente de los avisos e informaciones que al respecto emitirá el Centro de Operaciones de Emergencia (COE), como máximo organismo de socorro del país.
En la reunión estuvieron, además del ministro Ascención, los viceministros Roberto Herrera, de Supervisión y Fiscalización; Angel Tejeda, de Planificación y Regulación Técnica; Luis Bastardo, de Mantenimiento Vial; Mélito Santana, de Coordinación Regional, así como también el coronel Roque Ventura Sosa, en representación del director de la Comisión Militar y Policial.
También, directores generales y regionales de la institución cuyas áreas se integran a las labores previas, durante y después del paso de la tormenta tropical.
Recomendaciones y trabajos del MOPC
En la reunión, celebrada en el Salón de Conferencias de la institución, se acordó que previamente se trabaja en la limpieza de imbornales, a fin de evitar probables inundaciones ante el paso del fenómeno.
También, se está haciendo una verificación del estado actual de puentes tubulares y alcantarillas, y fueron activados los programas sociales y las brigadas médicas.
El protocolo de actuación del MOPC plantea que durante la tormenta, si la casa o lugar de trabajo son seguros se deben cerrar puertas y ventanas, proteger con cinta adhesiva o madera o asegurar los objetivos que pueda lanzar el viento.
Recomienda asimismo que al salir de la casa u oficina se debe desconectar las conexiones de agua, gas, corriente eléctrica, y llevar consigo documentos y utensilios personales más indispensables.
También, si las personas viven en zona de riesgo como cañadas, junto a presas, ríos o laderas, es más seguro trasladarse al albergue más cercano, donde deberán permanecer hasta que las autoridades les indiquen el tiempo en que podrán retornar a sus hogares.
Ante cualquier evento de peligro o accidente, se debe mantener la calma, y si el caso lo amerita llamar a su supervisor y a los organismos de socorro.
Después de la tormenta, las personas en refugio deben esperar que las autoridades les notifiquen que pueden salir de estos.
Para mitigar los efectos que pudiese generar la tormenta durante su paso, el MOPC cuenta con el apoyo de los equipos que se encuentran apostados en las distintas provincias.
Previo al paso de la tormenta, el protocolo de actuación del MOPC indica que se debe verificar las condiciones de la vivienda, en especial puertas, ventanas, paredes y techos.
También, que se deben tener a mano botiquines de primeros auxilios, disponer de linternas, disponer de comida y agua para por lo menos dos días, y medicamentos para al menos cinco días.
También, que los equipos de trabajo próximos a ríos y cañadas deben ser movilizados a zonas seguras.