Mujer mata a su doble para fingir su propia muerte
ALEMANIA.- Una joven alemana de origen iraquí llamada Shahraban K., es acusada de haber asesinado a una mujer con un gran parecido físico a ella, con la intención de fingir su propia muerte y poder así escapar de su familia.
El caso tiene un trasfondo por demás interesante, pues se menciona que la chica de 24 años de edad cometió el crimen luego de haber organizado un casting vía Instagram para encontrar a su doble, ejercicio en donde pudo reunir hasta seis participantes.
Si bien el crimen se presentó el 16 de agosto de 2022, siguen surgiendo novedades al respecto, como las nuevas órdenes de arresto levantadas los días 26 y 27 de enero contra la propia Shahraban y su cómplice Sheqir K., quien lo apoyó en el ataque cometido.
Ninguno de los dos involucrados ha mencionado algo al respecto, por lo que esperan el juicio que enfrentan, en donde podrían ser condenados a cadena perpetua.
¿Cómo atacaron y quién fue la doble asesinada?
Después de haber ganado el concurso, la bloguera argelina, Khadidja O., de 23 años de edad, fue citada por Shahraban, quien la recogió en un punto específico para después trasladarla hasta la ciudad de Ingolstadt, en donde se concretó el asesinato.
Shahraban K. y Sheqir K. ultimaron a la creadora de contenido en una zona boscosa y dejaron el cuerpo en el asiento trasero del vehículo que también fue abandonado muy cerca de donde vivía la víctima para después darse a la fuga.
Desde entonces nada se sabía de Shahraban, lo que provocó que sus familiares salieran en su búsqueda hasta encontrar el vehículo en cuestión y el cadáver de la joven engañada.
En primera instancia se pensó que los restos mortales pertenecían a Shahraban por el gran parecido físico, pero luego de realizados unos exámenes de ADN se llegó a la conclusión que no era así y que el cuerpo pertenecía a otra joven desaparecida llamada Khadidja O., originaria de Eppingen, Alemania.
Pasaron varios días hasta que Shahraban y Sheqir fueron acusados de presunto homicidio culposo, luego de propinarle hasta 50 heridas de arma blanca a su víctima, cuyo rostro quedó desfigurado.
