SANTO DOMINGO.- El Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) aprobó el despliegue por un año, el cual es prorrogable, de una fuerza multinacional de asistencia a la Policía de Haití, una petición que llega un año después de que fuera pedida por el propio Gobierno haitiano y respaldada de inmediato por el secretario general António Guterres.
La resolución fue aprobada por 13 votos a favor y dos abstenciones (Rusia y China), sin ningún voto contrario entre los 15 miembros del Consejo, algo raro en los últimos tiempos de gran división geopolítica.
El ministro de Relaciones Exteriores de Haití, Victor Généus, luego de agradecer a todos los que contribuyeron a la decisión adoptada, destacó que “fue más que una simple votación; es una expresión de solidaridad con una población en apuros”.
El Consejo hizo un balance de la crisis y comprendió la urgente necesidad de actuar, dijo, agradeciendo a Kenia por aceptar liderar la misión.
Por su parte, el representante de Kenia, Martin Kimani, dijo que el Consejo había encendido un rayo de esperanza para el asediado pueblo de Haití al adoptar la resolución.
Afirmó que Kenia está firmemente convencida de que la adopción será una “contribución fundamental” al renacimiento de la seguridad del país y un catalizador para el fortalecimiento de la gobernabilidad, la mejora socioeconómica y el estado de derecho.
Indicó que su país respondió al llamado de atención del Gobierno haitiano para encabezar la Misión, por lo que invita a los Estados miembros a aportar personal, fondos, equipos y apoyo logístico a la misión.
El embajador de Reino Unido ante la ONU, James Kariuki, destacando el voto de su país a favor de la resolución, expresó que la misión multinacional de apoyo a la seguridad en Haití es un paso importante para ayudar a la Policía Nacional a abordar el deterioro de la situación de seguridad.
Además, dijo que allana el camino para mayores esfuerzos para abordar las crisis de seguridad, humanitarias, políticas y económicas relacionadas. Aprovechó para destacar el liderazgo de Kenia al dar un paso al frente para liderar la misión.
“La adopción de hoy es un paso importante para ayudar a abordar la terrible situación de seguridad”, manifestó.
Sin embargo, subrayó que, a largo plazo, sólo una solución política puede dar al pueblo haitiano la seguridad y prosperidad que merece.
Por su parte, el representante de Ecuador, Hernán Pérez, externó que la disposición de Kenia para encabezar la misión de seguridad, el amplio apoyo recibido del “A3” en el Consejo y el respaldo de otros países de la Unión Africana es un claro ejemplo de cooperación sur-sur.
A su vez, espera que la adopción de la misión envíe un mensaje claro y contundente a los líderes y miembros de los grupos armados en Haití.
“Las comunicaciones estratégicas son clave, incluso antes del despliegue”, puntualizó, añadiendo que la crisis en Haití es multidimensional y, por tanto, requiere un enfoque integral.
“La resolución no es el objetivo final, sino un hito histórico sólido sobre el cual la comunidad internacional puede construir”, agregó.
Pedro Comissário, embajador de Mozambique, quien habló también por Ghana y Gabón, declaró que su voto a favor fue debido a que autoriza acciones en nombre de Haití y de la humanidad.
Describió la misión como un paso importante para frenar las actividades de los actores criminales que paralizaban a Haití y buscaban destruirlo.
Comissário llamó a todos los segmentos de la sociedad haitiana, que aún no lo han hecho, a unirse al consenso y ayudar a encaminar el camino hacia la recuperación del país.
De igual manera, la representante de Marta ante la ONU, Vanessa Frazier, comentó que su delegación votó a favor de la resolución, considerando la desesperada situación sobre el terreno y la responsabilidad del Consejo de Seguridad de responder con urgencia.
Expresó que para el éxito de la implementación de la resolución será fundamental su supervisión y la clara delimitación entre el papel de la misión y la acción humanitaria sobre el terreno, a la par de añadir la necesidad de elecciones libres y justas en Haití.
Adrián Dominik, embajador de Suiza, acogió con satisfacción la adopción de la resolución, afirmando que demuestra que las peticiones de ayuda de Haití han sido escuchadas.
“A Suiza le complace que el respeto del derecho internacional, en particular los derechos humanos, forme parte integral de la misión y refuerce su mandato”, afirmó.
Igualmente, celebró la importancia otorgada en el texto a la protección de la infancia, así como la inclusión de cuestiones de género y violencia sexual.
Al igual que Marta, le recomendó a la misión coordinarse con las ayudas internacionales para Haití, ya que estas “allanará el camino para el diálogo interhaitiano” para abordar la compleja crisis que vive el país.
En el caso de Japón, representado por Shino Mitsuko, manifestó que el primer paso para responder a la crisis es una preparación exhaustiva, una evaluación cuidadosa de la situación sobre el terreno y el establecimiento de una estructura de mando adecuada.
Al enfatizar que abordar la situación de seguridad por sí solo es insuficiente, dijo que debe ir de la mano con los esfuerzos de Haití para restaurar instituciones democráticas resilientes, establecer un gobierno responsable y brindar servicios básicos y oportunidades de desarrollo.
La representante de Emiratos Árabes Unidos, Lana Nuseibeh, también señaló que el personal de la misión necesita capacitación y experiencia para responder a la crisis haitiana.
A su vez, aseguró que es necesaria una acción decisiva para ayudar a Haití a retomar el camino de la paz y la estabilidad.
esaltó que se necesita una respuesta integral, que incluya un diálogo interhaitiano para lograr una solución política liderada y asumida por los haitianos.
Adrián Spasse, quien es el embajador de Albania, elogiando el liderazgo mostrado por Kenia así como la disposición de la Comunidad del Caribe (Caricom) para participar en la misión, dijo que votó a favor de la resolución reconociendo el papel vital que desempeñará en el restablecimiento de la seguridad y la creación de condiciones para la libertad y elecciones justas en Haití.
Por su parte, Brasil, representado por Sergio França, comentó que la resolución tiene aspectos clave que guían y sustentan la operación.
Dijo que el éxito a largo plazo requiere un enfoque integral, que incluya el imperativo de abordar las causas subyacentes de la violencia y la inestabilidad.
“Es urgente y vital lograr un amplio consenso político nacional”, agregó.
La solidaridad será insuficiente si no se toman medidas de manera comprometida y sincera, afirmó, añadiendo que se necesitan ciertos compromisos, incluido un embargo de armas completo para desarmar a las pandillas y grupos paramilitares, un amplio entendimiento político que permita a las instituciones del Estado recuperarse y la celebración de elecciones libres y justas, la fuerte reanudación de la ayuda humanitaria, y la cooperación y el apoyo económico, especialmente un apoyo duradero.
El embajador de Jamaica ante la ONU, Brian Christopher, hablando en nombre de Caricom, resaltó la importancia del apoyo de la comunidad internacional a Haití.
Aseguró que, como resultado de la flagrante criminalidad perpetrada por poderosas bandas y los consiguientes altos niveles de inseguridad, la mitad de la población haitiana necesita desesperadamente ayuda humanitaria y la situación empeora cada día.
“Este es el telón de fondo contra el cual estamos llamados a actuar: ayudar a restablecer la seguridad y contribuir a un entorno político, social y económico estable para fomentar el desarrollo sostenible en Haití”, subrayó, dando la bienvenida a la misión en Haití.
Tras señalar que otros países de la región y del mundo han asumido compromisos de apoyo en espera de la adopción de la resolución del Consejo, instó a otros Estados miembros a contribuir con personal de seguridad y apoyo logístico y financiero.
También, pidió a los Estados miembros que se comprometan con el Fondo Canasta de Seguridad a financiar las necesidades de la Policía Nacional de Haití y contribuir al Plan de Respuesta Humanitaria para Haití.
En ese sentido, Carolyn Rodriguez-Birkett, embajadora de Guyana, acogió con satisfacción las medidas decisivas adoptadas por el Consejo en respuesta a la situación en Haití.
No obstante, subrayó la naturaleza multidimensional de la crisis y pidió que la acción internacional también avance en la vía política y económica.
Declaró que cualquier solución a la crisis debe estar liderada por los haitianos, ser asumida y centrada, y estar libre de conveniencias geopolíticas.
Instó a los socios a garantizar que el plan humanitario recibiera financiación adecuada, incluso mediante inversiones en agricultura, para garantizar la seguridad alimentaria.
Guyana está proporcionando ayuda humanitaria a Haití, en forma de alimentos y medicinas, y está considerando otras formas de apoyo, tras la acción de hoy.