SAN PEDRO DE MACORÍZ, RD- El cuerpo del niño de ocho años que murió al recibir supuestamente al menos 147 heridas por una tía aún permanece en el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) de San Pedro de Macorís.
Hasta el momento nadie ha acudido a reclamar sus restos, según el personal del lugar.
La víctima llegó al Hospital Municipal de Verón, provincia La Altagracia sin signos vitales, luego de ser torturado por Carmen Jiménez y el señor González Valentín Rojas.
Según el médico legista, el menor tenía heridas múltiples en todo el cuerpo con signos de tortura y mutilación.