REDACCIÓN SALUD.- Resulta innegable que la actividad física es una herramienta para controlar, mantener y mejorar la salud y el bienestar, teniendo en cuenta entre sus múltiples beneficios: una mejor condición cardiopulmonar, muscular, metabólica, el fortalecimiento del sistema inmune, la reducción de los niveles de estrés y ansiedad, entre muchos otros.
De hecho, la inactividad física fue definida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como el cuarto factor de riesgo para las enfermedades no transmisibles. En el mundo, uno de cada cuatro adultos y tres de cada cuatro adolescentes (de 11 a 17 años) no cumplen las recomendaciones mundiales relativas a la actividad física establecidas por la OMS.
Se estima que en el mundo podría evitarse la muerte de más de 5 millones de personas si la población general cumpliera con las recomendaciones de actividad física.
En el marco del Día Mundial de la Actividad Física, que se conmemora el 6 de abril, Darío Escobar, médico endocrinólogo, coordinador de la Red Colombiana de Actividad Física, asegura que “es tan grave no hacer actividad física como mantenerse sedentario todo el día. Una persona que realiza una hora diaria de actividad física de intensidad moderada a vigorosa borra los beneficios de esta actividad si luego se sienta a trabajar de forma continua en su computador por 8 a 10 horas seguidas”.
Por tal razón, la recomendación es que, además de la sesión de actividad física, durante el día, cada una a dos horas, las personas se pongan de pie y realicen alguna actividad por 5 a 10 minutos; por ejemplo, subir y bajar escaleras, bailar un par de canciones, hacer estiramientos o caminar.
“Es muy importante sembrar en los hijos el hábito de la actividad física y del deporte, los niños no aprenden por lo que se les ordene, sino por el ejemplo que les den sus padres”, enfatiza Escobar.
Los especialistas recomiendan que la población de preescolares, es decir, los niños de entre 3 y 5 años, deben realizar como mínimo 180 minutos diarios de actividad física de cualquier intensidad, incluyendo el juego activo, mientras que en el grupo etario de entre 6 y 17 años dicha sugerencia es de 60 minutos diarios de ejercicio de intensidad moderada como mínimo 3 días a la semana, incluyendo actividades que fortalezcan músculos y huesos.
Por otra parte, los expertos aconsejan que para los adultos de entre 18 y 64 años esta práctica se extienda a 150 minutos semanales con una intensidad moderada, o 75 minutos semanales con intensidad vigorosa, a lo que se suma que al menos dos días se practiquen ejercicios de fortalecimiento muscular, ya que con la edad disminuye la masa muscular y la falta de movimiento puede atrofiar estos órganos.
En efecto, cabe mencionar que hay estudios que sugieren que una persona que realiza actividad física regularmente puede vivir tres años más que las personas sedentarias. Además, la actividad física trae consigo beneficios para el medioambiente en la medida en que aquellos que se transportan en bicicleta o caminando a sus sitios de trabajo evitan el uso de vehículos que contaminan.